@C. Vidal / «¿Qué os ha parecido la visita?», pregunta Alberto Fernández, director de Gestión del Área de Salud de Eivissa y Formentera y encargado de guiar a uno de los grupos en la primera de las dos jornadas de puertas abiertas del nuevo complejo hospitalario. La respuesta es unánime: «Todo es moderno, enorme y muy luminoso». Es decir, que aprueba con nota.
Por el momento sólo se trata de la presentación en sociedad del nuevo hospital, tanto para el personal del Área de Salud, este sábado, como para el público en general, el domingo. Habrá que esperar al próximo 7 de julio para que entren en funcionamiento algunas de sus consultas externas y, paulatinamente, ir ofreciendo servicios de aquí al final de año, que ya estará en pleno funcionamiento.
En la explanada de la entrada principal se puede observar de cerca el nuevo helicóptero Bell 412 del o61, con la posibilidad de subirse al aparato, así como tres ambulancias de soporte vital básico. Una vez en el vestíbulo empieza la visita guiada de un grupo de unas 25 personas conducido por Alberto Fernández y Antonio, celador del hospital.
Planta de hospitalización
Lo primero que hacen es ubicar a los visitantes: «Todos los edificios tienen una letra, desde la A hasta la K. Ahora estamos en el bloque D. Cuando habéis entrado tenéis enfrente las dos cafeterías de cristal, mientras que la zona de admisión, salón de actos y gabinete de prensa están en la primera planta. A la izquierda está la zona de rehabilitación, psiquiatría, quirófano y urgencias y, a la derecha, tenemos la zona ambulatoria, que son consultas externas, centro de día y diálisis. En los pisos de arriba están las plantas de hospitalización, que es lo que vamos a ver primero».
Nos subimos a uno de los ascensores, con capacidad máxima para 26 personas. «Igualitos a los del antiguo hospital, que casi da miedo subir en ellos», afirma una de las visitantes. Las plantas de hospitalización cuentan con 273 camas -por las 195 del antiguo hospital- y un 60% serán habitaciones individuales, algunas de ellas con vistas a Dalt Vila. «Seguro que con estas vistas los pacientes se recuperan antes», bromea Fernández.
«El hospital tiene cuatro colores y cada uno representa aspectos de Ibiza. El naranja es una guía visual para los pacientes y representa el atardecer. El azul, que es el cielo y el agua, son las zonas donde pueden estar los pacientes, mientras que el blanco, que es el color de las casas payesas, es sólo para trabajadores. Por último, la zona roja son los puestos de control de las enfermeras», interviente Antonio.
Bloque quirúrjico
Posteriormente pasamos al bloque quirúrjico y a urgencias, que son «las joyas de la corona del hospital, porque no sólo ganamos en espacio, sino también en tecnología, porque contaremos con los instrumentos más modernos». «La principal mejora es que pasamos de los seis quirófanos actuales, uno de ellos de urgencias, a nueve quirófanos, dos de Cirugía mayor ambulante (CMA) y otro integral, por el que a través de una pantalla se controlan todos los aparatos y, además, la intervención se puede retransmitir en directo», añade el director de Gestión.
Todo son mejoras con respecto al antiguo hospital, y no sólo en tamaño, teniendo en cuenta que se pasa de unos 25.000 metros cuadrados a los 45.000 del nuevo centro hospitalario. «No sólo destaca el edificio, también las calidades y la tecnología empleada. Por ejemplo, urgencias s prácticamente el doble de tamaño con respecto al actual hospital y, además, tiene otra ventaja como es contar con un área dedicada sólo a urgencias pedriáticas», comenta Fernández.
Hay dos entradas independientes para acceder a urgencias, una para peatones y, otra, exclusiva para ambulancias. Un técnico sanitario señala que esta segunda puerta no tiene sensores para abrir y cerrar las puertas y que eso es un serio inconveniente para el paso de las camillas. «Quizá es algo que haya que cambiar», reconoce.
La siguiente parada es en radiología, donde nos enseñan la nueva renonancia magnética de tres tiempos y de nueva generación. «En el actual hospital no había resonancia magnética y había que acudir a Vilás. Aquí si contamos con esta máquina, además de dos tacs y tres salas de convencionales. La tecnología crece exponencialmente y es un servicio para ilusionar», declara.
UCI y zona ambulatoria
También aumenta considerablemente la Unidad de Cuidados Intensivos, que tendrá 15 boxes cerrados y acristalados en vez de los nueve con los que se contaba hasta ahora. Fernández destaca principalmente las camas, que son de alta gama y con un precio cada una de ellas de «unos 20.000 euros». También tiene una sala de espera para familiares propia y una médico que está en el grupo señala que es una mejora importante porque «en el actual hospital, la sala de maternidad estaba al lado de la UCI, por lo que te encontrabas con gente muy feliz porque había nacido su hijo con otra muy triste por el estado de algún familiar».
De camino a la zona ambulatoria, la última de la visita, Fernández se detiene en el pasillo para señalar el búnker de la radioterapia, un servicio fuertemente reclamado en Ibiza. «El servicio está previsto para finales de año y a veces parece que es lo más importante y ha habido mucha polémica, pero la resonancia magnética y la radiología también son relevantes. Eso sí, contar con este servicio será una gran mejora para el hospital», asegura.
Por último, visitamos la zona ambulatoria, con las consultas externas, que serán las primeras en entrar en funcionamiento y, de hecho, algunas de ellas ya tienen el mobiliario y ordenadores, «que llegaron ayer mismo». También contará con un sistema de identificación de pacientes, por el cual entrarán su tarjeta médica en una máquina y en la pantalla de la sala de espera aparecerá su respectiva consulta.
Llegamos al punto y final de la visita, que se ha prolongado por espacio de casi 45 minutos y ante las quejas de cansancio y agotamiento de varios integrantes del grupo. Una cosa está clara, las nuevas instalaciones son inmensas y haría falta casi un día entero para recorrer todas sus salas. Eso sí, Ibiza puede presumir de que ya tiene una nuevo hospital tan moderno como funcional.