@Noudiari / La Apima de Can Raspalls de Sant Jordi ha publicado un comunicado en el que ha asegurado que la denuncia de una familia al colegio por presuntamente no dejar hablar en castellano a su hijo ha afectado al desarrollo de las clases.
«Nuestra preocupación es la sensación de que la demanda individual de esta madre afecta el buen desarrollo de las clases, ya que crea agravios comparativos entre nuestros hijos en el ámbito educativo», ha afirmado la dirección de la Apima, que ha hecho hincapié en su respaldo al colectivo de docentes del centro jordier.
«Invitamos a todos los padres a trabajar de forma colectiva y respetuosa en la mejora de nuestro centro en todos los ámbitos», añade el texto que ha remitido a todas las familias.
La asociación de padres y madres ha destacado que el CEIP Can Raspalls «prima la diversidad en las aulas», en las que están representadas diferentes nacionalidades, culturas, ideas y arraigos. En este sentido, han apuntado que uno de los puntos de conexión es «la cultura y la lengua de la isla de Ibiza».
El centro asegura que las acusaciones son falsas
Por otro lado, el Claustro y el Consejo Escolar del CEIP Can Raspalls ha hecho público otro comunicado en el que asevera que las acusaciones de la familia son falsas.
«Desde 2014, nuestra escuela está siendo cuestionada y está recibiendo acusaciones que crean un gran malestar a los docentes. Acogemos a alumnos de varios países y lo valoramos positivamente, ya que consideramos la diversidad como un aspecto enriquecedor y reflejo de la sociedad en la que vivimos. La lengua es un ejemplo más de esta diversidad y el alumnado es atendido correctamente sin importar la lengua que use», ha aseverado la dirección.
Asimismo, los profesores añaden que el conjunto de sus actuaciones relacionadas con el tratamiento de la lengua «quedan acogidas en la normativa que rige la educación en Balears y el Proyecto Lingüístico del Centro», un documento que «nace del consenso» y que ha sido aprobado por el Claustro, el Consejo Escolar e Inspección Educativa.
«El Claustro de profesores estamos unidos y convencidos del buen trabajo hecho y lamentamos profundamente las acusaciones e injurias que estamos sufriendo», añade el comunicado.
Esa madre marrullera!
Enhorabuena a los padres y a la dirección por el sentido común y evitar el conflicto con serenidad y argumentos válidos.