@D.V./ El paisaje desolado de unas vallas metálicas bajadas con el cartel de ‘Se Alquila’ o ‘Se Vende’ es cada vez más habitual en el centro de Vila, especialmente en las calles de los barrios de Can Bellet y es Palmer, como Arquebisbe Cardona Riera, Fray Vicent Nicolau o Sant Cristòfol. Hay manzanas enteras en las que prácticamente ya no quedan comercios abiertos -como en Arquebisbe Cardona Riera entre Isidor Macabich y Sant Cristófol- y calles que baten records en cuanto a la deserción de negocios. Así, en la calle Fray Vicent Nicolau, han cerrado las tiendas de los números 3, 7, 8, 15, 16 y 27, mientras que el del número 5 se ha trasladado.
Negocios históricos cierran como la Tintorería Royalti de la calle Vicente Serra, mientras otros cambian de barrio, como el famoso Forn des Tabaquet, de Arquebisbe Cardona Riera. Muchos más comercios han cerrado pero, sin embargo, algunos valientes todavía se atreven a emprender un negocio en esta zona.
“No creo que sea un problema de este barrio, sino del conjunto del pequeño comercio en Vila” comenta Laura Colomar, que el pasado mes de febrero abrió una tienda de ropa especializada en tallas grandes en la calle Sant Cristófol. Colomar apunta a otros problemas: “Alquilar un local en esta zona te puede costar 1.200 euros al mes, más lo que tienes que pagar en autónomos, convierte un negocio en inviable”.
La empresaria comenta que esta zona -los históricos barrios de Can Bellet y es Palmer- tiene aspectos positivos: “Es una zona de paso, hay mucho trasiego de vecinos y puedes ganarte una clientela poco a poco”. La clave está en especializarse y en minimizar los gastos: “Yo no he contratado a nadie. Estoy yo sola. Es la única manera de sobrevivir”.
“Muchos lo han dejado estar”
La especialización y hacer muchísimas horas es la receta que ofrece Maria Fernández, que hace un año también se lió la manta a la cabeza y abrió la tienda de golosinas y tartas de cumpleaños personalizadas ‘Campanilla Ibiza’, ubicada en una manzana donde su colorido escaparate destaca entre un paisaje de puertas metálicas bajadas que acumulan polvo.
“Antes eraun barrio bueno pero ahora ha perdido mucho”comenta, “en Navidades estas calles no se iluminan, y los alquileres son muy caros”. Después de un año tras el mostrador, Fernández empieza a ver el fruto de su esfuerzo: “Ahora la gente me está empezando a conocer. Hay que persistir y ofrecer algo único y personalizado: mis tartas de cumpleaños las hago yo misma, no las encontrarás en ningún otro sitio”.
Quien aguanta la crisis del pequeño comercio es la tienda de trofeos Cas Datilet. Vicente Tejada empezó el negocio en 1993 y no cree que el barrio esté en crisis: “Se cierran muchos comercios, pero también se abren de nuevos”, el problema es que la mayoría de nuevos negocios mueren después de un año. “Creo que la gente no sabe lo que significa llevar una tienda. Es algo muy sacrificado. No es abrir y ya está”.
¿Cual es el secreto de Cas Datilet? Según su dueño, consiste en “intentar tratar bien a la clientela y ofrecer precios acordes con los que hay en la Península, es decir, un poco más bajos que los que encuentras en otras tiendas de Ibiza”. Otro punto a favor es llevarlo todo en familia: “No hemos contratado a nadie. Aquí estoy yo, mi mujer, mis hijos y mi cuñada echando una mano”.
Es imposible que el pequeño comercio genérico que ocupaba el paisaje urbano de Vila sobreviva. Es imposible que compitan con las franquicias y grandes superficies abiertas -y las que vendrán, aún queda por llegar el sector electrónico y de electrodomésticos.
La salvación está en la especialización y el comercio de calidad y producto genuino. El pequeño comercio ya no será la gran despensa, el surtidor del productos estándar, sino el lugar al que acudiremos a comprar artículos muy especiales.
Para conseguir esto, los comerciantes deben conocer muy bien el producto que venden y habilitar sus tiendas de un modo atractivo, que invite a entrar.
Muy mal futuro veo. en grandes capitales pueden sobrevivir gracias a que no tienen los gastos de insularidad, pero aqui las multinacionales abarcando todo el mercado aniquilaran al pequeño comercio y a sus empleados, que desde luego daban mas empleos.
….. » AL COMENTARISTA PEPE» : decirle que es evidente que en el otro artículo cuando hablaba de a «pedradas con los etc» evidentemente hablaba de un modo figurativo… cunado me llama democráSTIKO… el año 2013 ya se mata a nadie a pedradas… sin embargo… si se dilapida o se «LAPIDA-DILAPIDA» el » PASADO-PRESENTE-FUTURO» DE LA HISTORIA PITIUSA……
A BASE DE :
– MERCADONAS QUE HAN DESTROZADO EL PEQUEÑO MEDIANO COMERCIO.
– SUPERFICIES PROYECTADAS EN PIJO DE LA BOLSA $$ DE 55000 M CUADRADOS MAS GRANDES QUE EL PARQUE DE LAA SALINAS.(MENOS MAL QUE HUBO UN POCO DE LÓGICA Y SE DIJO QUE NO)
– LA ALCALDESSA DE SANT JOSEP QUE DICE QUE LAS SONOMETRIAS DEL DC SON NEGATIVAS,, (NO LAS OYE DEBAJO DE SUS RULOS DE PELUQUERÍA)
– EL HOTEL CLANDESTINO,, QUE ES TAN AMBICIOSO QUE NO SE CONFORMA CON TENER CHAMBAOS (PACHAOS, PA QUIEN NO ME ENTIENDA) POR TO EL MUNDO… QUE TINE QUE COPIAR AL USHUAIA EN TODO ……
PUES SEÑORES HABEIS DAO CON UN HUESO… Y DE MOMENTO PARECE DURO .. Y PARECE QUE TIENE COJONEES.. EL DE ST EULALI,,, AVER SI SIGUE A SI Y CAMBIA IBIZA PARA MEJOR..
BONA NIT PEPETET.
Que tal si bajaran un poco los precios de los alquileres, hay algunos locales que están sobrevalorados y es imposible sacar adelante un negocio a corto plazo.
Tota sa raó del món, capità!
Y ya de paso los impuestos, algunos españoles están también muy sobrevalorados.
Esta crisis, va para largo. Dicen los lumbreras del gobierno que están subiendo el número de autónomos, pero estos cierran yendo bien la economía, la mitad ,en los primeros dos años, ahora claro no llegarán a tanto. Se funden el paro y los ahorros, y están peor que antes. El Sr. Vicente Tejada de Cas Datilet, tiene razón, llevar un negocio es muy, pero muy sacrificado, y todo son gastos. En realidad, la crisis económica, como ya se ha dicho hasta la saciedad, solo se puede combatir correctamente bajando los impuestos, pero España se encuentra pillada por los cataplines por la política Alemana, y el gobierno del PP no era la solución. Pero los españoles no entendieron o no supieron ejercer su responsabilidad cuando se le consultó. Faltan dos años, pero yo no las tengo todas…aún volverá la gente a quedarse en casa, o votar a formaciones que prometen tonterías, y que esconden las intenciones.
Si esto continua más allá del 2016, puede que reviente todo de una puta vez. Pero aun que yo me considero revolucionario, preferiría una transición a un estallido, ya que si se destruyen cosas que hacen falta para el tejido social, luego hace falta mucho tiempo y esfuerzo para volverlas a tener. Además los estallidos sociales conllevan mucho dolor y sufrimiento, odio y amargura, resentimiento y pérdidas irremediables. Pero la derecha española, parece decidida a tensar la cuerda de la sociedad. Veremos quien aguanta más, si los estúpidos y engreídos burgueses, o los sufridos currantes.