La innovación es la clave para redefinir el modelo de turismo surgido tras la irrupción en el mundo del coronavirus, según ha puesto de manifiesto la directora de Educación, Innovación e Inversiones de la Organización Mundial del Turismo (OMT), Natalia Bayona.
Los viajes internacionales cayeron un 74 por ciento durante la fase más dura de la crisis sanitaria, recuerda Bayona, momento en el que se registraron pérdidas por ingresos vinculados al turismo que alcanzaron el trillón de euros y estuvieron en riesgo los puestos de trabajo de 120 millones de personas.
Con el desplome de las inversiones a nivel global en 2020, este fue el sector económico más afectado; si bien, el gasto destinado a innovación tecnológica en la empresa turística durante la pandemia no sólo se mantuvo estable, sino que experimentó un ligero incremento en el primer semestre del año respecto a 2019.
Esto transmite un mensaje importante, la innovación ha venido para quedarse y es la propia actividad destinada a innovar la que facilitará el cambio, ha recalcado Bayona durante su intervención en la última jornada del encuentro sobre turismo espacial y subacuático, Sutus, que organiza la escuela de hostelería Les Roches.
Para la representante de la OMT, la transformación tecnológica se centrará, especialmente, en tres grandes subsectores económicos ligados a la actividad turística: el transporte, la industria pesada y el estilo de vida.
Y de la mano de la transformación de los referidos subsectores surgirán importantes oportunidades de negocio para el desarrollo y la aplicación de nuevas tecnologías, no solo en el turismo, sino también en la salud y la medicina, los servicios financieros, las telecomunicaciones, la publicidad o el cine.
Estados Unidos, China, Alemania, Japón e India -miembros del denominado Club Unicornio- lideran el mercado del desarrollo de las nuevas tecnologías y por tanto de las que se aplican al que ha sido uno de los sectores más golpeados por la crisis.
Del total de las inversiones que se realizan en tecnología, el cinco por ciento se destinan a la industria turística y una vez más -ha indicado Bayona-, son los países del Club Unicornio los que copan los primeros puestos en lo que se refiere a inversión y creación de empresas tecnológicas para el turismo.
En cuanto al objeto preferido mayoritariamente por estas compañías destacan la inteligencia artificial y el análisis de datos, la realidad virtual y aumentada, las tecnologías sostenibles, las aplicaciones para el sector sanitario, o la seguridad en la realización de transacciones.
Si bien, ha mencionado la directora de Educación, Innovación e Inversiones de la ONU, se detecta la falta de presencia de compañías originarias de países de zonas en desarrollo o expansión como África y Latinoamérica.
Junto a la innovación, la educación, la sostenibilidad, la confianza y la inversión constituyen pilares clave del modelo turístico desarrollado con la pandemia por coronavirus.
EFE