La naturaleza ha vuelto a sorprendernos con un fenómeno excepcional. En la madrugada de este viernes, el cielo de Ibiza se tiñó de un rojo vibrante, protagonizado por una aurora boreal que, de manera inusual, alcanzó las latitudes de las Islas Baleares. Este evento, pocas veces visto en esta zona, ha dejado imágenes inolvidables, las capturadas por el fotógrafo ibicenco Daniel Olmo y sus compañeros de aventura Marc Torres y Donovan Cruces, de la empresa de senderismo The Other Face Ibiza.
Las fotografías fueron tomadas desde sa Penya Esbarrada, en Santa Agnès de Corona, un lugar emblemático por sus espectaculares vistas del cielo nocturno y su baja contaminación lumínica. “Sabíamos que había una ligera probabilidad de que este fenómeno pudiera verse en Ibiza debido a la intensa actividad solar de los últimos días, así que no lo pensamos dos veces”, comenta Daniel Olmo, quien, junto a Marc y Donovan, decidió salir a la caza de este espectáculo natural. “Las condiciones eran perfectas: sin apenas nubes, sin luna y con un viento moderado que despejaba el horizonte”, añade.
La clave para capturar las imágenes, según Olmo, fue una exposición de 8 segundos, con una apertura de F2.8 y un ISO de 6400. “Es crucial evitar la contaminación lumínica para poder apreciar el verdadero esplendor de las auroras. Tuvimos suerte de estar en un sitio tan remoto como sa Penya Esbarrada, que nos ofreció el escenario perfecto”, explica el fotógrafo.
Marc Torres, también presente en la expedición, cuenta cómo vivió el momento: “De pronto se empezó a teñir todo el cielo de rojo durante. Lo más intenso duró 4 minutos. Sabíamos que estábamos ante algo único”. Su emoción era palpable al narrar cómo, por unos minutos, el cielo parecía cobrar vida ante sus ojos. “Estar allí y ver cómo la naturaleza nos regala estas maravillas no tiene precio”, señala.
Por su parte, Donovan Cruces, guía de senderismo, añade: “El silencio que había en ese momento era increíble. Solo se oía el clic de las cámaras. Estábamos hipnotizados”. Para Donovan, la experiencia ha sido una de las más especiales de su carrera, ya que, además de ser un amante de la naturaleza, fue testigo de un evento que se había repetido por segunda vez en menos de un año. “En mayo ya tuvimos la suerte de ver auroras en la isla, también muy potentes, pero esta vez fue igualmente impresionante. La intensidad de los colores nos dejó sin palabras”, cuenta.
Las auroras boreales, aunque típicas de latitudes mucho más altas, han llegado en ocasiones a España debido a tormentas solares particularmente fuertes. En esta ocasión, la potencia de la tormenta permitió que este fenómeno luminoso fuera visible en lugares tan al sur como Ibiza, creando una estampa inolvidable.
El evento tuvo lugar a las 1:15 de la madrugada, y aunque no muchos fueron testigos en vivo, las imágenes de Daniel Olmo y su equipo nos permiten revivir este histórico momento. Ibiza, una isla conocida por su belleza natural, ha sumado otro espectáculo a su lista de maravillas. “No sabemos cuándo volverá a repetirse algo así, pero no cabe duda de que todos los que estuvimos allí nunca lo olvidaremos”, concluye Daniel Olmo.
Este fenómeno refuerza la importancia de preservar los cielos nocturnos y minimizar la contaminación lumínica, algo que permite disfrutar de la naturaleza en su máxima expresión.