EFE / El director general del Agua del Ministerio de Transición Ecológica, Teodoro Estrela, ha explicado este miércoles que la nueva depuradora de Ibiza, ubicada en el recinto de sa Coma, iniciará una fase de pruebas en febrero para entrar en funcionamiento el próximo junio de 2024.
Estrela ha dicho que es una “muy buena noticia” que las nuevas instalaciones de depuración de Ibiza estén “a punto de terminarse” y ha detallado que en febrero la planta comenzará a operar recogiendo las aguas residuales de la estación de bombeo ubicada en la depuradora actual, con la que funcionará en paralelo hasta alcanzar los “parámetros de calidad óptimos”, un plazo que se calcula entre tres y cinco meses.
Una vez que se alcancen los valores de calidad requeridos, cuya previsión se estima en el mes de junio, se desconectará la antigua planta depuración de Ibiza.
Asimismo, Ministerio y el Govern balear están “trabajando” para llevar a cabo el traspaso de la planta, también en el mes de junio, para que una vez finalizada la infraestructura sea la Agencia balear del Agua y la Calidad Ambiental (Abaqua) la que se haga cargo de la gestión.
El director general ha aprovechado su visita a Ibiza para ver las otras instalaciones integradas en el sistema de depuración de aguas, como es como la estación de bombeo situada en la antigua depuradora, que será la encargada de impulsar las aguas residuales hasta la nueva planta de sa Coma, que deberá tratarlas y devolverlas para ser vertidas a través del emisario submarino.
También ha aprovechado para visitar la Estación de Depuración de Santa Eulària, también construida por el Ministerio, así como el tanque de tormentas del puerto de Ibiza. “Quería ver el conjunto de instalaciones, porque he estado siguiendo todos los trabajos, que no ha sido fácil, desde el Ministerio, pero no los había visitado”, ha añadido Estrela, que ha valorado que todas estas instalaciones “están en condiciones”.
La obra de la depuradora comenzó en 2017 y tenía previsto finalizar en 2021 pero sufrió retrasos por la aparición de restos arqueológicos y por la modificación del trazado de las conducciones de impulsión debido a un informe desfavorable de Recursos Hídricos. Este cambio de trazado fue el principal motivo del aumento de presupuesto, que comenzó en 25 millones y finalmente fue de 40 millones de euros.
Por su parte, el alcalde de Ibiza, Rafa Triguero, ha recordado que la ciudad “lleva muchos años sufriendo el infierno fecal” causado por los “vertidos continuos en pleno siglo XXI al mar Mediterráneo», y ha destacado que la puesta en marcha de la nueva infraestructura podrá “aliviar esas grandes incidencias”.