La producción de uva superó las 9.907 t, un 21% más que la campaña anterior, si bien hay que decir que la vendimia del 2017 se caracterizó por una baja producción, como consecuencia de la sequía y de las temperaturas elevadas. Si se comparan los datos de producción del 2018 con la vendimia del 2016, el incremento de producción es del 6%.La vendimia 2018 estuvo acondicionada por las elevadas lluvias de los meses de agosto y septiembre, cuya distribución fue muy heterogénea, por lo cual hay variaciones considerables de producción entre comarcas.Con relación a la producción de uva, hay que decir que un 65% de la uva fue de variedades negras y un 35% de uva blanca. Destaca que el incremento de producción de uva blanca fue del 33%, muy superior al incremento de la uva negra (16%), lo que es consecuencia de que la uva blanca se vendimia antes, a final de julio y principio de agosto, y casi no quedó afectada por las lluvias.
Con respecto a la producción de vino, se incrementó un 17% y se superaron los 6,3 millones de litros de vino, que hicieron alcanzar así la mayor marca registrada en la historia vitícola moderna de las Islas Baleares. Hay que destacar el incremento del 50% de vino blanco, lo cual se explica por las condiciones climáticas favorables de la vendimia de este tipo de vino y para una adaptación a la demanda del consumidor.
En cuanto a la evolución de la producción de los ocho vinos con denominación de calidad de la Comunidad Autónoma, hay que decir que, sin duda, han influido las condiciones climáticas, especialmente en el caso de los vinos de Ibiza y Formentera, donde el año 2017 hubo una vendimia de muy baja producción por la sequía.
La producción de uva superó las 9.907 t, un 21% más que la campaña anterior, si bien hay que decir que la vendimia del 2017 se caracterizó por una baja producción, como consecuencia de la sequía y de las temperaturas elevadas. Si se comparan los datos de producción del 2018 con la vendimia del 2016, el incremento de producción es del 6%.La vendimia 2018 estuvo acondicionada por las elevadas lluvias de los meses de agosto y septiembre, cuya distribución fue muy heterogénea, por lo cual hay variaciones considerables de producción entre comarcas.Con relación a la producción de uva, hay que decir que un 65% de la uva fue de variedades negras y un 35% de uva blanca. Destaca que el incremento de producción de uva blanca fue del 33%, muy superior al incremento de la uva negra (16%), lo que es consecuencia de que la uva blanca se vendimia antes, a final de julio y principio de agosto, y casi no quedó afectada por las lluvias.
Con respecto a la producción de vino, se incrementó un 17% y se superaron los 6,3 millones de litros de vino, que hicieron alcanzar así la mayor marca registrada en la historia vitícola moderna de las Islas Baleares. Hay que destacar el incremento del 50% de vino blanco, lo cual se explica por las condiciones climáticas favorables de la vendimia de este tipo de vino y para una adaptación a la demanda del consumidor.
En cuanto a la evolución de la producción de los ocho vinos con denominación de calidad de la Comunidad Autónoma, hay que decir que, sin duda, han influido las condiciones climáticas, especialmente en el caso de los vinos de Ibiza y Formentera, donde el año 2017 hubo una vendimia de muy baja producción por la sequía.
La producción de uva superó las 9.907 t, un 21% más que la campaña anterior, si bien hay que decir que la vendimia del 2017 se caracterizó por una baja producción, como consecuencia de la sequía y de las temperaturas elevadas. Si se comparan los datos de producción del 2018 con la vendimia del 2016, el incremento de producción es del 6%.La vendimia 2018 estuvo acondicionada por las elevadas lluvias de los meses de agosto y septiembre, cuya distribución fue muy heterogénea, por lo cual hay variaciones considerables de producción entre comarcas.Con relación a la producción de uva, hay que decir que un 65% de la uva fue de variedades negras y un 35% de uva blanca. Destaca que el incremento de producción de uva blanca fue del 33%, muy superior al incremento de la uva negra (16%), lo que es consecuencia de que la uva blanca se vendimia antes, a final de julio y principio de agosto, y casi no quedó afectada por las lluvias.
Con respecto a la producción de vino, se incrementó un 17% y se superaron los 6,3 millones de litros de vino, que hicieron alcanzar así la mayor marca registrada en la historia vitícola moderna de las Islas Baleares. Hay que destacar el incremento del 50% de vino blanco, lo cual se explica por las condiciones climáticas favorables de la vendimia de este tipo de vino y para una adaptación a la demanda del consumidor.
En cuanto a la evolución de la producción de los ocho vinos con denominación de calidad de la Comunidad Autónoma, hay que decir que, sin duda, han influido las condiciones climáticas, especialmente en el caso de los vinos de Ibiza y Formentera, donde el año 2017 hubo una vendimia de muy baja producción por la sequía.
La producción de uva superó las 9.907 t, un 21% más que la campaña anterior, si bien hay que decir que la vendimia del 2017 se caracterizó por una baja producción, como consecuencia de la sequía y de las temperaturas elevadas. Si se comparan los datos de producción del 2018 con la vendimia del 2016, el incremento de producción es del 6%.La vendimia 2018 estuvo acondicionada por las elevadas lluvias de los meses de agosto y septiembre, cuya distribución fue muy heterogénea, por lo cual hay variaciones considerables de producción entre comarcas.Con relación a la producción de uva, hay que decir que un 65% de la uva fue de variedades negras y un 35% de uva blanca. Destaca que el incremento de producción de uva blanca fue del 33%, muy superior al incremento de la uva negra (16%), lo que es consecuencia de que la uva blanca se vendimia antes, a final de julio y principio de agosto, y casi no quedó afectada por las lluvias.
Con respecto a la producción de vino, se incrementó un 17% y se superaron los 6,3 millones de litros de vino, que hicieron alcanzar así la mayor marca registrada en la historia vitícola moderna de las Islas Baleares. Hay que destacar el incremento del 50% de vino blanco, lo cual se explica por las condiciones climáticas favorables de la vendimia de este tipo de vino y para una adaptación a la demanda del consumidor.
En cuanto a la evolución de la producción de los ocho vinos con denominación de calidad de la Comunidad Autónoma, hay que decir que, sin duda, han influido las condiciones climáticas, especialmente en el caso de los vinos de Ibiza y Formentera, donde el año 2017 hubo una vendimia de muy baja producción por la sequía.
La producción de uva superó las 9.907 t, un 21% más que la campaña anterior, si bien hay que decir que la vendimia del 2017 se caracterizó por una baja producción, como consecuencia de la sequía y de las temperaturas elevadas. Si se comparan los datos de producción del 2018 con la vendimia del 2016, el incremento de producción es del 6%.La vendimia 2018 estuvo acondicionada por las elevadas lluvias de los meses de agosto y septiembre, cuya distribución fue muy heterogénea, por lo cual hay variaciones considerables de producción entre comarcas.Con relación a la producción de uva, hay que decir que un 65% de la uva fue de variedades negras y un 35% de uva blanca. Destaca que el incremento de producción de uva blanca fue del 33%, muy superior al incremento de la uva negra (16%), lo que es consecuencia de que la uva blanca se vendimia antes, a final de julio y principio de agosto, y casi no quedó afectada por las lluvias.
Con respecto a la producción de vino, se incrementó un 17% y se superaron los 6,3 millones de litros de vino, que hicieron alcanzar así la mayor marca registrada en la historia vitícola moderna de las Islas Baleares. Hay que destacar el incremento del 50% de vino blanco, lo cual se explica por las condiciones climáticas favorables de la vendimia de este tipo de vino y para una adaptación a la demanda del consumidor.
En cuanto a la evolución de la producción de los ocho vinos con denominación de calidad de la Comunidad Autónoma, hay que decir que, sin duda, han influido las condiciones climáticas, especialmente en el caso de los vinos de Ibiza y Formentera, donde el año 2017 hubo una vendimia de muy baja producción por la sequía.
La producción de uva superó las 9.907 t, un 21% más que la campaña anterior, si bien hay que decir que la vendimia del 2017 se caracterizó por una baja producción, como consecuencia de la sequía y de las temperaturas elevadas. Si se comparan los datos de producción del 2018 con la vendimia del 2016, el incremento de producción es del 6%.La vendimia 2018 estuvo acondicionada por las elevadas lluvias de los meses de agosto y septiembre, cuya distribución fue muy heterogénea, por lo cual hay variaciones considerables de producción entre comarcas.Con relación a la producción de uva, hay que decir que un 65% de la uva fue de variedades negras y un 35% de uva blanca. Destaca que el incremento de producción de uva blanca fue del 33%, muy superior al incremento de la uva negra (16%), lo que es consecuencia de que la uva blanca se vendimia antes, a final de julio y principio de agosto, y casi no quedó afectada por las lluvias.
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En cuanto a la evolución de la producción de los ocho vinos con denominación de calidad de la Comunidad Autónoma, hay que decir que, sin duda, han influido las condiciones climáticas, especialmente en el caso de los vinos de Ibiza y Formentera, donde el año 2017 hubo una vendimia de muy baja producción por la sequía.
La producción de uva superó las 9.907 t, un 21% más que la campaña anterior, si bien hay que decir que la vendimia del 2017 se caracterizó por una baja producción, como consecuencia de la sequía y de las temperaturas elevadas. Si se comparan los datos de producción del 2018 con la vendimia del 2016, el incremento de producción es del 6%.La vendimia 2018 estuvo acondicionada por las elevadas lluvias de los meses de agosto y septiembre, cuya distribución fue muy heterogénea, por lo cual hay variaciones considerables de producción entre comarcas.Con relación a la producción de uva, hay que decir que un 65% de la uva fue de variedades negras y un 35% de uva blanca. Destaca que el incremento de producción de uva blanca fue del 33%, muy superior al incremento de la uva negra (16%), lo que es consecuencia de que la uva blanca se vendimia antes, a final de julio y principio de agosto, y casi no quedó afectada por las lluvias.
Con respecto a la producción de vino, se incrementó un 17% y se superaron los 6,3 millones de litros de vino, que hicieron alcanzar así la mayor marca registrada en la historia vitícola moderna de las Islas Baleares. Hay que destacar el incremento del 50% de vino blanco, lo cual se explica por las condiciones climáticas favorables de la vendimia de este tipo de vino y para una adaptación a la demanda del consumidor.
En cuanto a la evolución de la producción de los ocho vinos con denominación de calidad de la Comunidad Autónoma, hay que decir que, sin duda, han influido las condiciones climáticas, especialmente en el caso de los vinos de Ibiza y Formentera, donde el año 2017 hubo una vendimia de muy baja producción por la sequía.
La producción de uva superó las 9.907 t, un 21% más que la campaña anterior, si bien hay que decir que la vendimia del 2017 se caracterizó por una baja producción, como consecuencia de la sequía y de las temperaturas elevadas. Si se comparan los datos de producción del 2018 con la vendimia del 2016, el incremento de producción es del 6%.La vendimia 2018 estuvo acondicionada por las elevadas lluvias de los meses de agosto y septiembre, cuya distribución fue muy heterogénea, por lo cual hay variaciones considerables de producción entre comarcas.Con relación a la producción de uva, hay que decir que un 65% de la uva fue de variedades negras y un 35% de uva blanca. Destaca que el incremento de producción de uva blanca fue del 33%, muy superior al incremento de la uva negra (16%), lo que es consecuencia de que la uva blanca se vendimia antes, a final de julio y principio de agosto, y casi no quedó afectada por las lluvias.
Con respecto a la producción de vino, se incrementó un 17% y se superaron los 6,3 millones de litros de vino, que hicieron alcanzar así la mayor marca registrada en la historia vitícola moderna de las Islas Baleares. Hay que destacar el incremento del 50% de vino blanco, lo cual se explica por las condiciones climáticas favorables de la vendimia de este tipo de vino y para una adaptación a la demanda del consumidor.
En cuanto a la evolución de la producción de los ocho vinos con denominación de calidad de la Comunidad Autónoma, hay que decir que, sin duda, han influido las condiciones climáticas, especialmente en el caso de los vinos de Ibiza y Formentera, donde el año 2017 hubo una vendimia de muy baja producción por la sequía.