En el verano de 2023, la temperatura del agua de mar de la bahía de Talamanca superó los 28 °C de media, consiguiendo un máximo de 30,1 °C en agosto. Este dato es una de las novedades destacadas del último informe de seguimiento anual de las praderas de Posidonia de la isla de Ibiza, llevado a cabo por el GEN-GOB y financiado por IbizaPreservation
Por primera vez, gracias a la instalación de termómetros acuáticos, el estudio ha monitorizado en varias estaciones la temperatura del agua durante todo un año, desde abril de 2023 hasta abril de 2024, apuntando a un calentamiento marino en este ecosistema vulnerable.
Asimismo, este último informe confirma la tendencia de degradación ambiental de las praderas de Posidonia en las siete estaciones de monitorización estudiadas durante el año de 2024 en la bahía de Talamanca y en Cala Vedella. En la primera, precisamente en la zona de Illa Grossa (Talamanca), y en la estación situada en la parte central de la bahía, las praderas de esta planta marina han perdido más del 50% de su superficie y continúan sin mostrar signos de recuperación. Por otro lado, desde el GEN-GOB han cuantificado que en la estación situada a 14 metros en Cala Vedella hay una media del 40% de la pradera muerta.
El estudio, realizado anualmente desde 2019, tiene como objetivo evaluar la evolución del ecosistema marino. Según Xisco Sobrado, coordinador del Área Marina del GEN-GOB, los resultados de los últimos seis años confirman la preocupante degradación de las praderas. «Hace seis años que analizamos el estado de estas praderas y su situación no mejora. La contaminación de las aguas y el impacto del fondeo de embarcaciones son factores que provocan su deterioro. La contaminación de las aguas altera la composición química del fondo marino, impidiendo la regeneración natural de la pradera, y el fondeo de embarcaciones provoca un impacto mecánico en la pradera que puede tardar siglos en recuperarse, a los cuales ahora se suma la constatación del aumento de la temperatura de nuestros mares a causa del cambio climático», explica Sobrado.
En lo referente a la situación registrada en Talamanca, Jordi Grivé, el regidor de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Ibiza, subraya la necesidad de adoptar medidas concretas para la protección del entorno marino. “Es imprescindible que continuemos avanzando en la investigación y en la toma de decisiones basadas en datos científicos, como los que se recojan en este informe, para implementar medidas que garanticen la recuperación de la posidonia y, a largo plazo , la preservación de nuestro entorno marino”, señala.
Asimismo, Grivé destaca que la colaboración entre instituciones, entidades ambientales y la ciudadanía será clave para afrontar este desafío, reafirmando el compromiso del Ayuntamiento de Ibiza con su conservación.
Por su parte, Inma Saranova, la directora de IbizaPreservation, desde donde han financiado el estudio gracias a fondos aportado por la marca de moda femenina Hoss Intropia, considera “necesario continuar apostando por la investigación y la mejora del conocimiento sobre el estado de la Posidonia a fin de poder identificar las causas precisas de su degradación para intentar revertir esta situación lo antes posible.”
“Continuaremos contribuyendo en este 2025 en el estudio del GEN-GOB y en el marco del Foro Marino trabajaremos activamente para dar soluciones en los problemas identificados hasta ahora ”, insiste Saranova, que también confía que, “entre todos y todas pasamos de una vez de las buenas intenciones a la toma de medidas concretas y eficaces para asegurar la supervivencia de esta planta”.
De este modo, tanto el GEN-GOB como IbizaPreservation coinciden, un año más, en la urgencia de tomar medidas de gestión. Según las entidades ambientales, es necesario avanzar hacia la reducción del número de embarcaciones durante la temporada estival, la instalación de fondeos de bajo impacto, así como una mejora de la calidad de las aguas, para preservar las praderas de Posidonia oceánica.