La actividad de las consultas de desplazados que han estado en funcionamiento entre el 15 de mayo y el 15 de octubre en los centros de salud de Es Viver, Vila, Sant Antoni y Santa Eulària han descendido un 18,9%, al pasar de 31.667 en 2022 a 25.675 en 2023, de acuerdo con los datos facilitados por el Área de Salud de Ibiza y Formentera.
«Ha habido un descenso generalizado en las atenciones relacionadas con la temporada turística», ha apuntado a Noudiari un portavoz del Área de Salud, quien ha agregado que por ello consideran que dicha disminución se puede atribuir «probablemente, a una menor presión turística este año respecto al pasado».
Así, ha detallado que la bajada se ha registrado tanto en la actividad de las consultas de desplazados, que son las que atienden a la población flotante de la isla -a turistas que pasan aquí largas estancias y a trabajadores de temporada-, como en los servicios de Urgencias. Como ejemplo de estos últimos ha apuntado que en Urgencias del hospital Can Misses ha habido un descenso del 7% en los casos atendidos de mayo a septiembre de este año en comparación con 2022.
Comparando los datos de las consultas de desplazados en los diferentes centros de Atención Primaria, se observa que la mayor actividad se ha dado en el centro de salud de Santa Eulària, mientras que la disminución más destacada de la misma se ha registrado en el centro de salud de Vila.
En concreto, entre el 15 de mayo y el 15 de octubre de este año en estas consultas del centro de la Villa del Río se atendieron 7.967 casos; en las de Sant Antoni, 7.335; en las de Vila, 6.103, y en las de Es Viver, 4.270. Sin embargo, un año antes habían sido 9.162, 9.058, 9.083 y 4.364, respectivamente.
Esto supone que en el centro de salud de Santa Eulària descendieron un 13%; en el de Sant Antoni disminuyeron un 19%; en el de Vila se redujeron un 32,8% y en el de Es Viver bajaron un 2,1%, de acuerdo con los datos facilitados.
Dos consultas en cada centro de salud desde 2022
Las consultas de desplazados están formadas por un profesional de Medicina Familiar y Comunitaria y por otro de Enfermería. Durante esta temporada, estos cuatro centros de Atención Primaria han contado con dos de estas consultas, de manera que en cada uno de ellos ha habido dos médicos y dos enfermeras dedicados a esta población que no tiene en la isla a su sanitario de referencia y que acuden a ellas para resolver cuestiones de atención programada o urgente.
Son consultas que tienen su origen en el aumento de población durante los meses de la temporada turística y que llevan funcionando «muchísimos años», ha afirmado el portavoz del Área de Salud, que no ha podido concretar cuándo se pusieron en marcha pero que ha destacado que lo que ha habido durante estos años ha sido una evolución de las mismas, de manera que «se han ido adaptando a las necesidades que han ido surgiendo en cada momento».
En este sentido, ha concretado que siempre había habido una única consulta de desplazados de Medicina Familiar y de Enfermería en cada uno de estos centros de salud hasta que en 2017 se amplió con una más en Sant Antoni. Y así se mantuvo hasta el año 2022, cuando se decidió ampliar a dos el número de consultas en los otros tres centros de salud.
Pero las consultas no sólo se han adaptado en número a la actividad y las necesidades asistenciales existentes, sino también en lo que respecta al tiempo que se mantenían operativas. «A lo largo de estos años se han ido alargando estos periodos en función de lo que se alargaba la temporada turística», ha apostillado y ha agregado que dicha ampliación se ha ido haciendo incluso a pesar de tener una fecha prevista de finalización si consideraban que era necesario.
Este año, las consultas de desplazados estuvieron operativas desde el 15 de mayo hasta el 15 de octubre, pero al contar con dos equipos en cada centro de salud se organizó para que uno de ellos trabajara desde el 15 de mayo hasta el 30 de septiembre y el otro, desde el 1 de junio hasta el 15 de octubre. «Se dio cobertura del 15 de mayo al 15 de octubre pero al inicio y al final sólo había un equipo porque era suficiente para atender la demanda de ese momento», ha explicado.
Nuevos contratos y reorganización de dos plazas
La cobertura de los 16 profesionales que han atendido estas consultas se ha realizado, mayoritariamente, con nuevos contratos. De acuerdo con la información facilitada, en el caso de Medicina Familiar y Comunitaria se han cubierto los ocho contratos necesarios, mientras que en Enfermería sólo se cubrieron seis de los ocho ofertados.
«Dos no se han cubierto y [las plazas] han sido ocupadas por profesionales de Enfermería de los centros de salud, que han pasado a estas consultas de desplazados reorganizando así la actividad del servicio», ha comentado el portavoz del Área de Salud, que ha agregado que esto ha sido posible «sin que suponga una sobrecarga de trabajo para el resto del personal» porque en verano disminuye la actividad de las consultas programadas de Enfermería.
Así, ha detallado que las consultas de Enfermería de Atención Primaria han descendido un 9,7% de enero a septiembre de 2023 respecto a 2022, mientras que las consultas médicas han crecido 2,8% en el mismo periodo. «Este descenso, que es aún más acusado en verano, donde hay un trasvase de la atención programada a la atención urgente o relacionada con el turismo, ha permitido reorganizar», ha añadido.
En cuanto a la previsión para la próxima temporada, ha afirmado que las ampliaciones de equipos o refuerzos dependerán «indudablemente, de la actividad que haya». «Este descenso del 20% hace pensar que los recursos existentes actuales dan respuesta a la situación actual, pero eso no significa que no se valore, llegado el momento, poder ampliar otro equipo si la situación así lo requiere», ha concluido.