Fue solo una hora de temporal intenso, pero el desastre es evidente. El balance provisional del brutal paso de la DANA por Formentera, deja, por el momento, cerca de 40 barcos afectados, nueve heridos y numerosos daños materiales en tierra.
Solo entre es Cavall d’en Borràs y Espalmador hay 27 barcos varados, según muestran las impresionantes imágenes tomadas por Maria Serra con un dron esta misma mañana y que ha cedido a Noudiari para poder informar con detalle de la catástrofe.
Hay barcos varados en sa Sequi, en la orilla de ses Illetes, entre los restaurantes es Ministre y Juan y Andrea; una embarcación se ha hundido en Cala Saona con nueve personas heridas tras encallar contra las rocas, y varios barcos más han quedado varados en esta playa.
En este sentido, navegantes experimentados comentan a Noudiari a través de mensajes por redes sociales lo increíble que resulta «no solo que la gente salga a la mar con avisos y una alerta naranja» sino el hecho de que «se siga permitiendo el fondeo libre y sin control alrededor de la isla de Formentera», una permisividad que está también detrás de este desastre ya que la mayor parte de los barcos afectados no estaban navegando sino fondeados.
Además, los daños han afectado en tierra: según datos oficiales del Consell de Formentera y testimonios de testigos, en el restaurante Molí de Sal han salido por los aires el tejado, cristaleras, tabiques y los baños que había delante del molino, que ya no existen. Unos datos que corroboran las imágenes de Maria Serra. Las chapas del tejado y otros elementos se han desperdigado por los alrededores del restaurante. El personal se afana en devolver la normalidad al establecimiento barriendo y recuperando enseres.
El puerto ha permanecido cerrado aproximadamente una hora entre las 10 y las 11 por rachas de viento superiores a los 50 nudos.