EFE/ El sexto Plan de Lucha contra la Precariedad Laboral en Baleares incidirá principalmente en reducir la llamada «parcialidad no deseada», es decir, la de aquellos trabajadores que querrían trabajar más horas de lo que hacen, y que afecta a un 17,6 % de las mujeres y un 8,4 % de los hombres en las islas.
«Hemos rehecho los objetivos fuertes del Plan de Lucha contra la Precariedad, ahora ya no vamos a la temporalidad porque la resolvemos a través de la reforma laboral, y se centra en tres ejes importantes: la parcialidad no deseada, los controles del tiempo de trabajo y las faltas de alta en la Seguridad Social», ha anunciado la presidenta del Govern, la socialista Francina Armengol, en una rueda de prensa de este lunes por la mañana.
En los controles de tiempo de trabajo, las inspecciones se centrarán en especial en horas extras ilegales, el registro de jornada que es obligatorio desde mayo de 2019, y los descansos entre jornadas. Armengol ha destacado que en la lucha contra la parcialidad no deseada, dado que afecta más a las mujeres, las actuaciones se enfocarán con perspectiva de genero, y también beneficiarán más a los jóvenes, porque se encuentran entre los más perjudicados por esta situación.
La presidenta ha llamado la atención sobre el hecho que poder retomar este plan implica que Baleares ha superado «otras situaciones» derivadas de la pandemia, está en plena recuperación económica, y puede incidir en mejorar las condiciones de trabajo y combatir la precariedad.
Las islas, «rozando el pleno empleo»
Ha recalcado que Baleares está «rozando el pleno empleo», con tasas de paro de alrededor del 6% y con récords históricos de afiliación a la Seguridad Social mes tras mes. «Hemos recuperado bien nuestra economía, estamos en un momento de subida sólida», ha asegurado, si bien ha precisado que se mantienen ciertas «incertidumbres».
Armengol ha destacado la importancia que ha tenido la aprobación de la reforma laboral estatal, que está reduciendo de forma significativa «el problema más grave» en las islas que era la temporalidad, en pro de la contratación indefinida, de manera que en la actualidad, de cada diez nuevos contratos que se firman en Baleares, dos son temporales y ocho indefinidos.
«Cuando aplicamos los anteriores planes de lucha contra la precariedad, estábamos absolutamente al revés: de cada diez, dos eran indefinidos y ocho temporales, por lo que nos teníamos que ceñir a eso en la lucha contra esa precariedad», ha indicado. Este año, el plan incidirá en mejorar la calidad porque en Baleares «todavía no están garantizados los parámetros de dignificación» en el trabajo.
Inspectores en las Pitiusas
Para llevar a cabo este nuevo plan, aprobado por la mesa de diálogo social, vendrán 30 inspectores de la península a las islas: 14 actuarán en Mallorca (560 actuaciones), 8 en Ibiza (320 actuaciones), 6 en Menorca (320) y 2 en Formentera (80). Está previsto que lleven a cabo más de 1.200 actuaciones, 400 de ellas en las Pitiusas. Además, en el Plan se suma un administrativo en Ibiza y Formentera para agilizar la tramitación de los expedientes. Al acabar la campaña se hará un balance con los principales resultados de este verano.
El conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, el socialista Iago Negueruela, ha explicado que esos 30 inspectores llegados de la península para el plan que se aplica en la temporada turística alta, refuerzan a los cerca de 80 inspectores de Trabajo y Seguridad Social existentes en las islas.
En el caso de los controles del tiempo de trabajo, Negueruela ha destacado que existen nuevas herramientas que lo facilitarán. Desde la aplicación del primer «Plan de Lucha contra la Precariedad», en 2015, más de 30.700 trabajadores han mejorado sus condiciones de trabajo. En el último año, el número de beneficiarios por mejoras derivadas de infracciones detectadas en estas inspecciones fue de unos 6.700 trabajadores.