EFE / Esta semana no se sancionará a quienes no utilicen la mascarilla obligatoria en Baleares «por una cuestión de adaptación y advertencia», ha anunciado este lunes la consellera de Salud y Consumo, Patricia Gómez, quien ha precisado que no se multará hasta el 20 de julio.
Gómez ha informado en una rueda de prensa sobre la resolución que modifica el decreto que regula las medidas de la «nueva normalidad» en Baleares para fijar la obligatoriedad de la mascarilla y que se publicará a lo largo de este lunes en un BOIB extraordinario y ha recordado que no llevarla se podrá sancionar con hasta 100 euros.
La consellera ha detallado que Salud está elaborando la instrucción correspondiente a las sanciones junto con la Conselleria de Administraciones Públicas y ha explicado que la intención es facilitarlo también a quienes tienen que establecer la sanción.
Sobre el hecho de si los establecimientos serán responsables si los clientes no utilizan la mascarilla, Gómez ha explicado que del mismo modo que tienen que cumplir la normativa de aforo, deben cumplir el resto del ordenamiento jurídico, incluida esta nueva resolución.
El uso de mascarilla, obligatorio desde este lunes en Baleares, no lo será en espacios de la naturaleza al aire libre, fuera de núcleos de población, playas, paseos marítimos y piscinas, siempre que la afluencia de personas en esos espacios permita mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros.
«Los paseos al lado de la costa, son lugares ventilados y, si se puede mantener la distancia no es necesario el uso de mascarilla por parte de nadie», ha explicado la consellera sobre la resolución que modifica el decreto que regula las medidas de la «nueva normalidad» en Baleares para fijar la obligatoriedad de la mascarilla.
Ha insistido en que, si los paseos están «muy concurridos», sí que habrá que usar mascarilla. Ante el caso de la Playa de Palma, que es un paseo marítimo urbano, Gómez ha dicho: «Tenemos que asegurarnos de que puede mantenerse el metro y medio». Ha insistido en que no tendrá que utilizarse «si alrededor no hay aglomeración de gente».
Además, también están exentos del uso de mascarilla los menores de 16 años cuando estén participando en actividades habituales con su grupo de convivencia estable de ocio infantil y juvenil.
Gómez ha detallado además que, en centros de trabajo, no es obligatorio usarla si se puede garantizar la distancia interpersonal de 1,5 metros entre los trabajadores.
La consellera de Salud ha defendido la obligatoriedad del uso de la mascarilla por el hecho de que «ha demostrado ser muy efectiva como instrumento que frena la propagación del virus» y porque ante el aumento de movilidad y la presencia de personas en los espacios públicos, no es posible asegurar que se mantiene esta distancia mínima interpersonal de 1,5 metros «en la mayoría de situaciones»