@V. R. / V. T. / La estación de autobuses del Cetis ha vuelto a tener actividad durante la mañana de este lunes tras más de cinco años cerrada por los diferentes desencuentros judiciales entre el Ayuntamiento de Ibiza, el Consell insular, la empresa concesionaria y las diferentes empresas implicadas. Los informadores han recorrido las paradas habituales para explicar a los clientes el nuevo punto de llegada y partida de los buses en el municipio, muchos de ellos despistados con el cambio.
Un lustro en el que la política se ha mostrado incapaz de dar respuesta a los ciudadanos y los millones de turistas que visitan cada año la pitiusa norte, privados de una infraestructura básica durante todo este tiempo. Desde las siete de la mañana, los usuarios hacían cola en la estación, tanto en los andenes situados en la calle, fuera del edificio, como en los que se hallan en la planta inferior del edificio.
La cronología es infinita entre recursos judiciales, desencuentros y paripés en los medios de comunicación locales. El último acto ha sido revelador: la estación de sa Colomina reabre con un gasto extraordinario de más de un millón de euros para subvencionar a las cuatro empresas de autobuses que operan las líneas regulares. Un contrato que será renovable y revisable anualmente.
La utilización del Cetis supone un incremento en el precio de 10 céntimos por pasajero en el billete sencillo, aunque el Consell de Eivissa no lo aplicará a los titulares de las tarjetas de transporte público T-General, T-Plata, T-Daurada y T-Jove. Actualmente hay expedidas más de 30.000 tarjetas de transporte público en la isla.
Esta novedad ha hecho que, al igual que sucedió en el estreno, algunos ibicencos se hayan posicionado en contra, ya que alegan que obliga a caminar hasta uno de los extremos de la capital para tomar la línea. Otros, en cambio, la defienden con convencimiento al hacer posible una mayor fluidez del tráfico en las principales arterias de Vila.
Uno de los cambios más significativos es la conexión de la mayoría de líneas con el hospital Can Misses, de acuerdo con lo previsto en el nuevo plan de transporte de viajeros por carretera de la isla de Eivissa.
Vuelve a estar en marcha una de las cagadas mas grandes nunca vistas en Baleares en materia de infraestructuras, nadies se acuerda de Xicu Tarrés hoy? Es el padre de la criatura «antes oficinas que estación» y allí lo tenemos oficinas con poca salida (suerte tienen de los juzgados) y una estación enterrada donde las principales linias descargan arriba (una por aquí otra por allí..) vamos «un bunyol» hablando en ibicenco claro.
El Cetis reabre. Al fin una buena noticia. Al PP le molesta, a la gente le encanta. De vez en cuando hay que ser agradecido y reconocer los hechos. Gracias a la conselleria de Mobilitat el bus empieza a ser una alternativa real al coche. Hoy es un día importante, sí señor!!!
Como puede ser que San Antonio tenga una estación de autobuses a las afueras del pueblo, Santa Eulalia tenga una estación de autobuses a las afueras del pueblo e Ibiza no lo tenga, y los autobuses tienen que estar estacionados horas en Isidoro Macabich. A los políticos de cuánto peor mejor había que darle su merecido.
Algún conductor de autobús está desinformando a los pasajeros, diciéndoles que no pueden recoger gente en ningún punto de Ibiza y animandoles accent en hojas de reclamación.
Esta movida vine como respuesta del PP a la oposición ciudadana a la construcción de las autopistas de Ibiza. Hay que reconocer que las autopistas eran necesarias pero no el macroproyecto que se hizo, poniendo a una hija de Matutes en la Consellería de transportes, saliendo todo la grava para construir las fracturas de la cantera de Matutes.
Repito: a los políticos de cuánto peor mejor habría que darle su merecido. Además claro, de la cárcel por robar, cosa ésta que ya se ha hecho.