La Asociación de Viviendas Turísticas (AVAT) ha valorado hoy el proyecto de modificación de la Ley de Actividades, que tiene como objetivo el perseguir, disuadir y sancionar la celebración de fiestas ilegales en viviendas en las islas, especialmente en Ibiza. Esta nueva normativa incluye multas de 100.000 a 300.000 a los organizadores pero que incluye sanciones a los comercializadores, colaboradores, participantes y propietarios de la vivienda donde se celebre.
«AVAT, como no puede ser de otra manera, está total y contundentemente en contra de esta actividad ilegal por lo que celebramos que las Administraciones tomen medidas serias contra ella«, indican.
Sin embargo, se muestran preocupados por varios aspectos. «Queremos dejar meridianamente claro que ni a los comercializadores de viviendas ni a los propietarios les interesa que se celebre una actividad ilegal en una vivienda turística, por lo que su posible responsabilidad en la organización de esta se dará probablemente en ínfimos casos», indican y se muestran muy inquietos porque los propietarios «puedan ser sancionados con elevadas cuantías por acciones realizadas por clientes, pese a que estén prohibidas en el contrato de arrendamiento correspondiente. Deberá quedar muy claro que el propietario ha colaborado activamente en la organización para ser sancionado«, afirman.
Y añaden: «Los propietarios no pueden controlar lo que hacen los inquilinos en todo momento puesto que hay cuestiones que chocarían con el derecho a la intimidad de estos. No obstante, las viviendas cumplen con la obligación legal de registrar quiénes son los inquilinos y facilitar su documentación a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado».
Por último, aplauden que se diferencie la fiesta ilegal (es decir, fiesta con ánimo de lucro) de aquella fiesta o celebración privada que puede celebrarse con total normalidad siguiendo obviamente la normativa municipal correspondiente de ruidos».