Molina se considera víctima de una «injusta campaña» de desprestigio personal

@Noudiari / El ya exconcejal de Hacienda y exprimer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Ibiza, Alfonso Molina, ha explicado en un comunicado que se siente víctima de una injusta campaña de desprestigio personal basada en expedientes administrativos.

«Sin ser mi intención hablar mal de nada ni de nadie, considero que es absolutamente injusta la campaña que un determinado medio de comunicación ha emprendido contra mi, basada en expedientes administrativos relacionados con la gestión de subvenciones de formación que alguna de las empresas en las que yo he tenido interés a lo largo del tiempo. Esta consideración respecto de la justicia o injusticia de la campaña es por supuesto personal, pero se basa en determinados hechos que sí que relacionaré a continuación»:

1. A través de mis empresas he desarrollado profesionalmente la actividad de formación desde el año 1992, colaborando en esto con numerosas organizaciones y administraciones, realizando más de dos mil acciones formativas y colaborando en la formación y la mejora de la empleabilidad de más de quince mil personas de nuestra isla.
   
2. En todo ese proceso, la práctica totalidad de las subvenciones que alguna de mis empresas haya recibido no ha tenido ningún problema ni en su gestión, ni en su justificación ni liquidación. Las diferencias de cualquier tipo que pueda haber habido se han resuelto siempre en vía administrativa de modo satisfactorio.

3. En particular, en los cursos subvencionados por el SOIB, la presencia de los y las técnicos de esta entidad en los cursos era constante, antes durante y después. Los cursos siempre eran visitados en una o más ocasiones, de modo que el SOIB tenía constancia de la efectiva realización de la formación, de que los materiales y medios didácticos, las aulas, el equipo docente y los programas formativos se ajustaban convenientemente  a unas condiciones cada vez más estrictas, determinadas en las especificaciones técnicas de los cursos.

4. En un momento determinado se produce un cambio de criterio interpretativo de la normativa que regula la justificación económica de las subvenciones, y que se aplica a todos aquellos expedientes abiertos en el momento, incluyendo los de acciones formativas ya realizadas, y que conduce a que se ponga en duda por parte del SOIB diversos aspectos muy relevantes de la gestión económica de los cursos. Este cambio de criterio interpretativo afecta de modo generalizado a decenas de entidades prestadoras de servicios de formación en las baleares: empresas privadas, organizaciones empresariales, sindicales, fundaciones, etc. Sin tener la información precisa sobre la magnitud de esta situación, no sería extraño situarla alrededor de los 7-9 millones de euros en total, de los que una parte pequeña se corresponde con formación desarrollada por mi empresa. Es cuando menos llamativo que se produzca de modo simultáneo y generalizado un hecho de estas características que afecta a la mayor parte de los agentes de formación relevantes de las islas, y que por cierto ya ha supuesto la interposición de recursos contenciosos por parte de distintas entidades.

5. Como cualquier otra sociedad mercantil o particular que no está de acuerdo con decisiones administrativas, mi empresa defiende y defenderá en la sede que corresponda, administrativa o contenciosa, que en todo momento obró en cada momento atendiendo a la legalidad, y no renuncia no sólo a no tener que devolver cantidad alguna por cursos que fueron efectivamente realizados, sino a cobrar las liquidaciones positivas a su favor que pudieran corresponder.

6. En particular defiendo enérgicamente la actuación de mi empresa y de todas las personas de ella que colaboraron en que miles de personas de nuestra isla recibieran una formación de calidad que para muchos ha supuesto poder acceder al mercado laboral en mejores condiciones, incluso en condiciones en las que las demoras en los pagos del SOIB podían medirse en años.

Asimismo, Molina explica que, «independientemente de todo lo anterior, que tiene que ver estrictamente con mi carrera profesional anterior a la actual etapa como representante público, entiendo que en estos momentos no estoy en condiciones de desarrollar adecuadamente mis funciones como primer teniente de alcalde del Ajuntament d’Eivissa, y que corresponde dejar paso a otro compañero o compañera que pueda ocupar mi puesto en el equipo de gobierno de la ciudad. El paso por la política no es más que un episodio en la vida de las personas, y el mío ha terminado».

«Estos tres años han sido maravillosos -continúa Molina-. Ha sido un privilegio poder trabajar para la ciudad y la ciudadanía dentro de un gobierno unido, apasionado por su trabajo y magníficamente dirigido por el alcalde. Ha sido un privilegio también compartir esfuerzos con el magnífico equipo humano del Ajuntament d’Eivissa, cada cual en su puesto de trabajo y con sus funciones. Puedo atestiguar que todas y cada una de las personas que forman la plantilla del Ajuntament se desempeñan con una entrega absoluta, y gracias a esto se mantiene en marcha la maquinaria municipal pese a las absurdas limitaciones legales existentes».

Por último, Molina ha querido agradecer a las decenas de personas que le han mostrado su apoyo personal estos días, empezando por su familia, sus compañeros de gobierno y de partido, trabajadores municipales, ciudadanos y amigos, «que pese a todo hayan creído y siguen creyendo en mi», concluye