NouDiari / El conseller de Medi Ambient i Territori, Miquel Mir, y el director general de Espacios Naturales y Biodiversidad, Llorenç Mas, han presentado, este jueves, la Estrategia de Movilidad Sostenible del Parque Natural de Ses Salines para la isla de Ibiza.
El documento tiene por objetivo adecuar la movilidad de las personas a la protección de los recursos naturales, paisajísticos y etnológicos del espacio natural protegido, dado el aumento del tránsito y de los usos turísticos y recreativos que se ha producido durante los últimos años.
La estrategia, que abarca más de 1.500 hectáreas, ha analizado la carga de vehículos motorizados, y establece propuestas de mejora con el objetivo de reducir los impactos derivados de la movilidad dentro del parque.
Se parte de cuatro líneas prioritarias transversales, que se concretan a través de una treintena de actuaciones que se tienen que poner en marcha desde las diversas administraciones competentes.
El conseller ha destacado «el alto consenso de este documento, que cuenta con aportaciones del Consell de Ibiza y el Ayuntamiento de Sant Josep». Mir ha señalado que el hecho de marcar una hoja de ruta compartida «permitirá adecuar la capacidad de carga del Parque a los valores ambientales, garantizando así la conservación de un espacio emblemático como ses Salines»
Por su parte, Mas ha explicado que la prioridad de la estrategia «es que peatones y ciclistas pasen a tener el protagonismo en la movilidad del Parque, haciendo que el coche pase a ser un factor secundario». Por eso, ha dicho, «hay que seguir con la recuperación de caminos como el de Can Blai, potenciar el transporte público y hacer que el vehículo privado no sea necesario».
El documento propone 10 rutas senderistas en el ámbito del Parque natural y que discurren por el Camino de sa Salinera, el de sa Sal Rossa, el Camino del Corb Marí, del Cap des Falcó, de los Estanys, de la Torre de ses Portes, el de Pou des Carbó, el Camino del Aeropuerto, del Codolar i de sa Caleta. De este modo las rutas quedan interconectadas, y se evita la invasión de espacios sensibles hasta ahora empleados por inexistencia de caminos señalizados.
Uno de los ejes principales es reducir considerablemente el acceso al parque con vehículo privado. Así, el documento prevé cuatro tipos de viario: el principal, que discurre desde el aparcamiento disuasorio de Sant Jordi hasta el aparcamiento de Ses Salines y desde Sant Jordi hasta el Codolar; el secundario, que llega hasta Es Cavallet, Es Codolar, Platja d’en Bossa y Cap des Falcó; uno de acceso restringido, donde quedarían los caminos de sa Sal Rossa, Sa Revista, Sa Canal y Sa Caleta; y uno de acceso restringido habilitado para acceder al intercambiador del Toro-Mar. En este punto se recomienda dotar de un acceso a buses lanzadora y de línea, y un punto de alquiler de bicicletas. El punto estaría dotado de paneles informativos de las rutas del Parque y del estado de la red.
En cuanto a los aparcamientos, se proponen dos con carácter disuasorio en Platja d’en Bossa y en Sant Jordi. Para los tres aparcamientos existentes en las playas se establece un número máximo de plazas: 650 en Ses Salines, de 75 a 100 plazas en Es Cavallet y hasta 120 en Sa Caleta- Es Bol Nou. Además se establecen seis puntos de control de accesos, desvío del tránsito y desvíos habilitados.
En cuanto a las bicicletas, la estrategia dibuja un viario que recorre diferentes caminos del parque, la mayoría coinciden con las senderistas, y contempla 7 aparcamientos para bicicletas y 4 puntos de alquiler.