@Noudiari/El Partido Popular presentará una moción al pleno de este jueves para pedir al equipo de gobierno que dé marcha atrás en una licencia que ha concedido para transformar un hostal de 88 plazas en un albergue privado de 36o plazas. Según los populares, esta licencia «ha suscitado sorpresa y rechazo por parte de sectores importantes de la sociedad, especialmente del ámbito hotelero».
En un comunicado, el PP ha advertido de que el albergue privado «supone una contradicción» con respecto a las previsiones del futuro del pueblo, reflejadas en el Plan Estratégico de Sant Antoni 2016-2030.
Según el PP, «aparentemente el Ayuntamiento se vio obligado a otorgar esta licencia» porque la normativa turística excluye este tipo de establecimientos de sus competencias, que pasan a depender de la normativa en materia de juventud.
Sin embargo, los populares ponen en duda que no se hubiera podido rechazar «si hubiera existido verdadera voluntad política de denegarla» mediante la ordenanza de Usos del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) o con la imposición de requisitos «que habrían resultado de difícil o imposible cumplimiento». También cuestiona que con el alquiler de plazas en el aparcamiento de la Plaza de España, ubicado a 650 metros, se cumpla el requisito obligatorio de contar con parking.
Los populares preguntarán en el pleno si se han cumplido todos los requisitos legales para conceder la licencia. En todo caso, consideran que «lo más preocupante», es que si se confirma la legalidad de la licencia, otros hoteles también puedan transformarse en albergues.
Por ello, proponen al pleno que con carácter urgente se haga una modificación puntual del planeamiento municipal para prohibir el uso de albergue privado o bien para que se establezcan requisitos compatibles con el Plan Estratégico 2016-2030.
Si lo anterior no fuera imposible, también piden que se inste al Govern y al Parlament a que deroguen la normativa que permite este tipo de licencias o que, al igual que con los pisos turísticos, sean los ayuntamientos lo que puedan decidir sobre estas instalaciones.
No a airbnb, no a albergues… Ya se ve a quién se le está haciendo el juego.