El Juzgado de Instrucción número 1 de Ibiza en funciones de guardia decretó ayer la prisión provisional para cuatro de los siete detenidos en la operación anti droga en el barrio de Sa Penya de la ciudad de Ibiza que pasaron a disposición judicial. Uno de ellos puede eludir la prisión con una fianza.
Otros tres detenidos quedaron ayer en libertad provisional, según informan hoy fuentes del Tribunal Superior de Justicia (TSJIB). Otro detenido en la operación que ha pasado hoy a disposición judicial también ha quedado en libertad provisional, aunque le han impuesto comparecencias periódicas ante el Juzgado.
La Policía Nacional de Ibiza, dentro de esta operación, ha detenido en total a 11 personas por traficar con droga en el barrio de Sa Penya, de las que siete han pasado por el momento a disposición judicial por sus antecedentes penales.
Además han desmantelado un narcopiso de venta y consumo de droga, a la vez que ha descubierto que otro domicilio era empleado como almacén de estupefacientes también en el barrio de Sa Penya.
La operación arrancaba el pasado lunes, cuando agentes de Policía Nacional Ibiza, del Grupo UDYCO, se personaron en el barrio tras una investigación iniciada el pasado mes de septiembre.
Se habían centrado en averiguar cómo operaba una de las principales organizaciones dedicadas a la venta de droga en el barrio de Sa Penya, de la ciudad de Ibiza.
Diez de las once personas detenidas son españolas y hay, además, una persona de origen polaco. Siete de ellas tienen antecedentes por hechos similares y otros delitos.
Además, en los dos registros domiciliarios han intervenido algo más de un kilo de cocaína, 25 gramos de heroína, un arma blanca de grandes dimensiones y básculas de precisión.
“La presencia policial en el barrio de Sa Penya permitió detectar como principal punto de venta de droga una vivienda, en donde además de distribuirse sustancia estupefaciente se facilitaba a los toxicómanos el consumo en su interior, constituyendo un verdadero narcopiso“, explicaba ayer la Policía Nacional sobre el balance de la operación.
Tras una serie de investigaciones alrededor del punto de venta, comprobaron la presencia de un nutrido grupo de personas perfectamente organizadas y coordinadas que ejercían principalmente tareas de seguridad.
Durante la investigación los agentes descubrieron también que los delincuentes contaban con otra vivienda donde almacenaban droga y a la que acudían cuando necesitaban abastecer el punto de venta. Esta segunda vivienda con funciones almacén también se encontraba en el barrio de Sa Penya.
“Una vez reunida toda la información se dio inicio a la fase de explotación de investigación con la práctica de los registros de los inmuebles de las dos viviendas, localizándose en esta última la práctica totalidad de sustancias estupefacientes intervenidas”, añaden. En el dispositivo participaron más de 20 agentes de la Policía Nacional.