El 27 de octubre apareció publicada la convocatoria de ayudas del Consell Insular d’Eivissa para hacer frente al impacto económico familiar ocasionado por el Covid-19 (después de que el PSOE lo propusiera en abril). Esta convocatoria contemplaba un gasto máximo de 600.000 euros, a repartir en cuatro modalidades: mujeres víctimas de violencia machista, personas con discapacidad, familias acogedoras de menores, y familias que han visto reducidos sus ingresos económicos por culpa de la crisis de la pandemia. Con 10 días de plazo, tan sólo, para registrar la solicitud.
Por desgracia, en nuestra isla hay miles de familias que están en ERTE desde marzo, con menos ingresos económicos, pero con la misma hipoteca o un alquiler que pagar, y con serias dificultades para hacer frente a los recibos de la luz, el agua o la compra. Estas familias, que nunca se habían visto obligadas a subsistir solicitando ayudas, son precisamente el perfil de las familias que entran de lleno en la “modalidad D” de estas ayudas del Consell Insular. Las mismas que se vieron forzadas, junto a las mujeres víctimas de violencia de género, personas con discapacidad con dificultad para acceder al mundo laboral y las familias acogedoras de menores con medidas de protección, a guardar cola en la avenida España durante horas, en medio de la calle, de manera indigna, exponiendo su privacidad, provocando además una situación caótica y aglomeraciones de centenares de personas, inaceptable en la situación de pandemia que estamos viviendo.
Quedó así patente y por desgracia la falta de previsión del ejecutivo del Sr. Vicent Marí, lo que ocasionó que se quedaran muy cortos, tanto en la previsión económica destinada a estas ayudas, como en las medidas implantadas para hacerlas llegar a todas las personas que las necesitaban, las cuales el mínimo que merecen es una atención digna por parte del Consell Insular.
Ante estos hechos, el grupo PSOE presentó una moción en la que pedía ampliar la partida económica de estas ayudas y una segunda convocatoria extraordinaria para cubrir las solicitudes de las personas que cumplieran con los requisitos y que se quedaron fuera de la primera. También que se habilitará una partida suficiente en los presupuestos de 2021 para estas familias y establecer un sistema de registro de solicitudes para mejorar y facilitar la presentación, tanto de las solicitudes presenciales como las que se hagan vía electrónica, sin que las personas solicitantes tengan que exponerse de manera indigna guardando cola en la calle. Por desgracia, la moción socialistas se desestimó con los votos en contra tanto del PP como de Ciudadanos. Argumentaron que analizarían y estudiarían las solicitudes recibidas, antes de tomar nuevas medidas.
Y he aquí que nos presentan para su aprobación los presupuestos del Consell Insular para el 2021 y no encontramos ni rastro de una mejora de estas ayudas y de su forma de tramitación para evitar las colas. Unos presupuestos que recibieron el voto en contra del PSOE porque son insuficientes, porque, por mucho que lo quieran maquillar, no son unos presupuestos sociales que ayuden a la recuperación y, en definitiva, porque no están a la altura del momento. Para comenzar porque no cumplen, ni de lejos, lo que PP y Ciudadanos se comprometieron a hacer en su documento “Bases para la recuperación” que presentaron antes del verano.
¿Así es como piensan mejorar las ayudas a las miles de familias de nuestra isla en una situación económica muy complicada por culpa de la pandemia?»
En estos presupuestos del Consell Insular, calificados por el Sr. Vicent Marí como “un presupuesto excepcional para una época excepcional”, aparece la misma partida de 600.000 euros para ayudas por la Covid-19 que la destinada en la convocatoria del pasado mes de octubre. La misma cantidad para unas ayudas que, según ellos mismos reconocieron, PP y Ciudadanos, superaron todas sus previsiones. La misma cantidad para unas ayudas que “desbordaron” la Oficina de Atención a la Ciudadanía del Consell Insular. Además, en estos presupuestos nos encontramos con la congelación total de los presupuestos de administración general, mientras que en informática y nuevas tecnologías bajan en personal y en inversiones.
¿Así es como piensan mejorar las ayudas a las miles de familias de nuestra isla en una situación económica muy complicada por culpa de la pandemia? ¿Así es como quieren hacer frente a la digitalización de la administración, para que los trámites se puedan hacer fácilmente a través de Internet? ¿Así es como quieren evitar las indignantes colas en la calle de centenares de familias, por las que tuvieron que pedir disculpas?
Por el contrario, eso sí, en el presupuesto del Consell Insular para el 2021 encontramos una partida de 1.200.000 euros para gasto corriente del departamento Presidencia (destinado al autobombo del Sr. Vicent Marí). Esto supone el doble en autobombo del presidente que en ayudas sociales por la Covid-19; y supone una subida del autobombo del 20% respecto al presupuesto del 2020 y del 100% respecto al del 2019, el último presupuesto de la anterior legislatura progresista. Debe ser que el autobombo y la promoción personal de Vicent Marí son prioritarios en unos presupuestos excepcionales, para una situación excepcional.
Por Víctor Torres Pérez, conseller insular del PSOE y secretario de Comunicación y Relaciones Institucionales de la FSE-PSOE