Laura Ferrer Arambarri / ¿Habrá este año escuelas de verano? Es la gran pregunta de muchas familias de la isla de Ibiza, que están pendientes de este servicio para poder conciliar su trabajo con su vida personal.
La realidad es que, sin estas escuelas, muchas familias se enfrentan a un gran problema porque no tienen dónde dejar a sus hijos menores durante su horario laboral si este es presencial.
Aunque también hay otras muchas familias que tienen claro que no llevarán a sus hijos a un campamento o a una escuela de verano por miedo a contagios.
A través de mail y llamadas, padres y madres es están poniendo en contacto con los diferentes ayuntamientos para saber qué va a pasar, pero todavía no se sabe con seguridad porque no ha habido una orden ministerial específica al respecto.
La intención es que sí haya esta opción en Baleares, tal y como confirma el Consell de Ibiza.
«En las Islas Baleares hay un grupo de trabajo de Juventud, del que el Consell Insular forma parte, y que está coordinando los protocolos para una posible apertura de actividades de tiempo libre así como escuelas de verano», informa la institución a NouDiari.
«Se trabaja con la idea de que este año habrá ambas cosas o, al menos, que sí estarán permitidas, tanto campamentos como escuelas de verano», avanzan.
«Todavía no hay ninguna norma escrita sobre cómo deben ser y, por tanto, no podemos decir cuándo empezarán», explica el Consell, del que depende el Campamento de Cala Jondal.
El Consell Insular no es promotor de escuelas de verano pero sí le corresponde la competencia del cumplimiento de la normativa de este servicio.
Que haya o no escuelas de verano depende de sus promotores, que son sobre todo Ayuntamientos, s’Espurna (escuela de tiempo libre y animación) o clubes deportivos privados, por ejemplo.
Hablamos con los cinco ayuntamientos de sus planes al respecto:
Santa Eulària
En Santa Eulària están trabajando ya sobre el tema, pero reconocen que hay una gran incertidumbre al respecto: «Nosotros estamos empezando a trabajar, pero es muy difícil sin saber al final qué condiciones se van a imponer», matizan.
A Santa Eulària les gustaría ponerlas en marcha porque entienden que, por una parte, «para los chavales es una buena experiencia por la posibilidad de hacer deporte, estar con sus amigos y hacer nuevas amistades», y, por otra, «es positiva para los padres, ya que puede ser una buena ayuda a la hora de poder conciliar».
En todo caso tendrán que tener «muy claras» las exigencias de seguridad.
Al igual que sucede en otros ayuntamientos, desde Santa Eulària están dando pasos en esta dirección, comprobando, por ejemplo «la disponibilidad de colegios para poder hacerlas o empezando a contactar con personal a ver si estarían dispuestos» pero, matizan, «todavía está todo muy verde porque, sin medidas concretas, no sabemos todo lo que habrá que hacer».
Sant Antoni
El Ayuntamiento de Sant Antoni tiene todo preparado para sacar las plazas en el momento que se pueda. Está a la espera de que haya instrucciones detalladas y concretas para saber si finalmente se podrán abrir y en qué condiciones (número de plazas, ratios, etc).
«En el momento en que se sepa algo más concreto, se podrán establecer los protocolos e informar a padres y madres sobre el proceso para realizar las inscripciones, en el que se tendrá en cuenta las necesidades de las familias», apuntan.
Sant Joan
Por su parte, Ángel Pascual Fernández, técnico de deportes de Sant Joan, explica a Noudiari que, si se puede, celebrarán las escuelas de verano, que el año pasado dieron servicio a unos 200 niños y niñas.
«Nadie lo tiene claro. Esperamos que Sanidad encamine un poco más las directrices y condiciones con las que se podrían abrir o, simplemente, si se puede o no se puede. Una escuela de verano como la nuestra, que es deportiva, ¿cómo va a garantizar una distancia de dos metros entre niños? Pues es complicado», advierte.
Fernández explica que se habla, por ejemplo, de una reducción de matrículas en un 50%.
De todos modos, el técnico ve otros dos temas sobre la mesa: «Primero, que hay muchos padres y madres que no van a tener trabajo como siempre este verano y, segundo, que hay padres que no quieren exponer a sus hijos a una escuela de verano por lo que pueda pasar». Esto reduciría mucho la demanda habitual.
En todo caso y si es posible, a Sant Joan le gustaría que, al menos, las familias sí tuviesen la opción, «porque sabemos que es importante».
«Incluso se habla de abrir colegios públicos en julio para que los alumnos puedan acudir en verano. Todo está en el aire», recuerda el técnico.
Sant Josep
Desde el Ayuntamiento de Sant Josep están muy pendientes de las instrucciones que emita conselleria de Joventut, «pero ya estamos trabajando para poder actuar en cualquier escenario con una respuesta rápida», puntualizan.
Es decir, que si se permiten, podrán ofrecerlas.
Ibiza ciudad
En la misma línea, en Ibiza están pendientes de las instrucciones de Sanidad. Apuntan a que están trabajando en la organización, a la espera de saber si se podrán hacer y en qué condiciones.
A causa de la crisis sanitaria, el Ayuntamiento de Ibiza decidió en abril aplazar las inscripciones para las escuelas de verano a mayo, pero todo depende ahora de las instrucciones que lleguen por parte de Sanidad y del Govern balear
Certificados de trabajo presencial
Por otra parte, los padres y madres que quieran llevar a sus hijos a los colegios y escoletas ya están preparando su certificado de trabajo presencial para poder llevarlos a partir del 25 de mayo, cuando está previsto abrir colegios, a pesar de la oposición de buena parte de la comunidad educativa, que considera que no tienen medios sufientes ni están preparados para poder abrir los centros.