La Delegación del Gobierno en Illes Balears ha destruido este martes en la planta incineradora de TIRME en Son Reus (Palma), un total de 30 fardos de hachís que contenían cuatro toneladas y media de droga.
El alijo, compuesto de numerosas tabletas de diferentes tipos de esta sustancia, fue incautado por el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidrogas de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil el pasado mes de septiembre en Ibiza.
La de hoy es la tercera operación de destrucción de sustancias estupefacientes incautadas por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que se lleva a cabo este año en las islas; en total, en 2022 se han incinerado 9 toneladas de droga en la planta de Son Reus.
En la anterior, el pasado mes de abril, fueron destruidas más de tres toneladas y media, en gran parte procedentes de una operación de la Guardia Civil en Cala Mastella en Ibiza, que se saldó con 14 detenidos.
El alijo incinerado hoy corresponde a la mayor incautación de hachís registrada en los últimos años en esta isla.
La Delegación del Gobierno destaca el trabajo desempeñado en las islas por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la lucha contra el narcotráfico, con la colaboración de los funcionarios de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y de las Policías Locales
La incineración de la droga ha sido supervisada por el secretario general de la Delegación del Gobierno en Illes Balears, Ramon Morey, y por el director del Área de Sanidad, Raúl Izquierdo. También ha acudido el comandante de la Guardia Civil Enrique Gómez Bastida.