@Noudiari/ El departamento de Actividades del Ayuntamiento de Sant Antoni, en colaboración con la Policía Local, realizó el sábado diferentes inspecciones en cuatro establecimientos del núcleo urbano. Como resultado se constató que todos ellos incumplián la ordenanza municipal de ruidos y, en consecuencia, la ley de Actividades.
Los bares y cafés concierto inspeccionados no se han adaptado a día de hoy a la normativa aprobada en 2013, por lo que se levantaron cuatro actas de inspección que incluyen como medidas cautelares la paralización y clausura de la actividad musical si, transcurridos los 15 días de trámite de audiencia, no se ha regularizado la situación de estos locales.
Asimismo, se comprobó que los cuatro negocios inspeccionados superaban la ocupación de vía pública autorizada por el Consistorio y que uno de ellos carecía de dicha autorización al no haber renovado la de temporadas anteriores. Tras comprobar los hechos se levantó acta de inspección a cada uno de estos locales para poder iniciar posteriormente los expedientes sancionadores que correspondan. Los locales inspeccionados disponen de 72 horas para retirar los elementos que sobrepasen la ocupación autorizada.
El más terrible es el bar Kanya, en Calo des Moro. Desde hace años destroza al vecindario con música a todo volumen. Da igual cuántas veces llames a la policía, ellos siguen groseramente. Es un escándalo que destroza una zona muy bonita de San Antonio, que corre el riesgo de convertirse en otro West.