@B.R./ «En Sant Josep nos hemos dormido con este tema». Así de contundente se ha expresado el alcalde de Sant Josep, Josep Marí Ribas, en la reunión que ha tenido lugar esta tarde en el Ayuntamiento para explicar la situación actual de la gestión del agua. Esta afirmación la ha hecho cuando ha resaltado que todos los municipios tienen agua, salvo Sant Josep: «No hemos exigido y no hemos hecho lo que teníamos que hacer y, ahora, tenemos que recuperar el tiempo perdido», ha indicado.
Marí Ribas se ha mostrado confiando ante la puesta en marcha de la interconexión de las desaladoras que facilitará, según ha precisado, la llegada de agua al municipio. Para logra este fin, que se centra en garantizar el suministro de agua a toda la población y que esta sea de calidad, también es preciso, según ha apuntado el primer edil, mejorar la red municipal, que actualmente pierde un 44% de su caudal inicial. Para Marí Ribas, con estas dos medidas, se podría contar con un suministro de agua digno dentro de un año.
Para ello, el alcalde de Sant Josep ha apuntado que de cara a los próximos presupuestos del Consistorio «se harán pocos polideportivos y pocos jardines» parea mejorar así en la calidad del servicio. De hecho, se ha aventurado a precisar que se podría destinar hasta el 70% del capítulo de inversiones del presupuesto de 2016.
De hecho ha adelantado, que el próximo 10 de septiembre se desplazará a Madrid junto al conseller balear de Medi Ambient, Vicenç Vidal, y el alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, para tratar la puesta en marcha de la desaladora.
A lo largo de la charla, Marí Ribas se ha mostrado a favor de dejar de extraer agua de los acuíferos «durante muchos años» con el objetivo de que éstos se recuperen. «A lo mejor tenemos que consumir agua desalada durante un tiempo para dejar que se recuperen los pozos. Asimismo, tanto el alcalde como algún asistente han resaltado el hecho de que no exista ningún tipo de control sobre las perforadas. El responsable de Aqualia en Sant Josep, Jordi Grivé, ha asegurado que no hay absolutamente nadie que controle los caudales que se extraen de estos pozos privados.
Entre las actuaciones que también se plantea el Ayuntamiento de Sant Josep está la modificación de la ordenanza del agua para curar nuevas tarifas «que penalicen el derroche de agua» o, incluso, «establecer cuotas máximas de consumo».
En su exposición, Marí Ribas ha precisado que en Sant Josep se consumen unos seis millones de toneladas de agua al año y existen 10.590 contadores de consumo. «Si el agua fuera buena, habría más», ha puntualizado. Además, también ha resaltado el incremento de la población en la última década que ha pasado de 17.000 a unos 25.000 ciudadanos, lo que supone un aumento de 46%.
La red municipal de agua de Sant Josep consta de 300 km de tuberías en los que hay 16 bombas de impulsión y 20 reductores de presión, debido a la orografía del municipio.
El que se ha dormido es usted, que ya no sabe si entran los expedientes en el ayuntamiento. Por el bien de todos, despierte Sr. Marí! porque sino va a pasar la legislatura sin hacer parques ni dar agua, es decir en blanco, igual que en su anterior legislatura.
Q afirmación más gratuita… Legislatura en blanco la de vila de la pasada legislatura.
El agua es un servicio público, amén de un derecho, y no debería estar en manos privadas nunca. La gestión del agua ha de ser pública.
No falta agua. Sobran guiris, piscinas, jardines de césped, mansiones y urbanizacione.
Ya estamos con el discursito de siempre. Si te parece vamos a quitar aquella parte del turismo que directa o indirectamente genera tu salario o tu forma de vida, que? Como lo ves? lo quitamos?
El que vale, vale, y el que no se dedica al turismo.
Ja.
Deberían destinar el 70% de los próximos 10 presupuestos, con el acuerdo de todas las fuerzas políticas. Lo que ocurre en San Josep, y en toda la isla, con el ciclo del agua es tercermundista.