La caseta de Navidad de Sant Jordi ha quedado en este lamentable estado tras sufrir actos vandálicos por parte de unos desconocidos (al menos por el momento) que han destruido la decoración y se han llevado varios de los elementos navideños del interior.
El sillón donde se sentaba Papá Noel y donde iban a hacerlo los Reyes Magos, así como los elfos, la iluminación y otros elementos de decoración han sido arrancados.
El Ayuntamiento de Sant Josep lo ha denunciado en sus redes y ha lamentado que, finalmente, «a quienes más perjudica todo esto es a los niños y niñas del pueblo».
«Son ellos y ellas los que más ilusión tienen ante la llegada de los Reyes de Oriente, que este año quedará deslucida porque no queda casi tiempo para reponer todo lo que se ha saqueado», lamentan.
Así lucía antes del saqueo, durante una visita de Papá Noel:
«La decoración navideña, como el resto del mobiliario público, son de todos y todas. El Ayuntamiento hará todo lo posible para recibir sus Majestades Reales con toda la solemnidad que merecen para que ningún niño se pierda su magia», avanzan en un comunicado en las redes sociales del Consistorio.
Estos hechos han provocado una cascada de indignación en la parroquia, que, además, este año tiene una decoración especialmente pensada para los niños que muchos han disfrutado.
Incluso hay quien apunta a un grupo de jóvenes en actitud sospechosa, que ha estado merodeando por la plaza y abriendo coches. «¡Qué sinvergüenzas!», se quejan hoy los vecinos, que hasta piden cámaras de seguridad para vigilar estos espacios públicos ya que no es la primera vez que pasan cosas similares.