@D.V./ La sesión de ayer de la Comisión Informativa del Ayuntamiento de Eivissa ya empieza a tener consecuencias. Después de que los tenientes de alcalde Joan Daura y Lina Sansano descargasen sobre la alcaldesa, Marienna Sánchez-Jáuregui, la completa responsabilidad sobre los supuestos pagos irregulares al semanario Prensa Pitiusa, ahora es el presidente del Partido Popular en Eivissa, Vicent Serra, quien empieza a marcar distancias.
Así, esta mañana, cuando se le ha preguntado sobre el futuro Sánchez-Jáuregui, el presidente de los populares ibicencos no ha defendido a la alcaldesa de Eivissa y ha mantenido una calculada ambigüedad: “A la vista de las informaciones que se están conociendo y que aparecen en los medios de comunicación [las acusaciones de Daura y Sansano sobre la alcaldesa], desde el Partido Popular realizaremos las valoraciones”.
Cuando se le ha preguntado por la posibilidad de que el PP fuerce la dimisión de Sánchez-Jáuregui, Serra no ha puesto la mano en el fuego por el futuro de la alcaldesa y tampoco le ha dedicado ni una sola palabra de apoyo: “Ahora no quiero hacer hipótesis de futuro. El partido necesita tiempo para estudiar el tema”. Con un tono calculadamente frío y distante, sin citar nunca a la alcaldesa por su nombre, Serra ha asegurado que el partido tomará decisiones una vez la Comisión haya presentado sus conclusiones, algo que se realizará este viernes. Posteriormente, ha asegurado que tendrán en cuenta “todo lo que se está diciendo y todo lo que está apareciendo”. Unas palabras que dejan la puerta abierta a una posible salida Sánchez-Jáuregui.