@Vicent Torres / Está claro que a una parte de la ciudadanía de Ibiza no le ha sentado bien la implantación de nuevos radares fijos por parte de la Dirección General de Tráfico (DGT). Desde que se instalaron, el radar de la carretera de Sant Carles ha sido destrozado en dos ocasiones, una de ellas durante la fase de pruebas. Esta vez ha sido el que hay situado en la carretera de Sant Josep a Sant Antoni (PM-803), justo después de la glorieta de acceso a Cova Santa. Algún vándalo ha destrozado una de las dos ópticas de este equipo de control de la velocidad máxima, que esta mañana estaba inutilizado, aunque el equipo ya ha sido reparado.
Espero que con estas acciones la guardia civil aprenda que no se puede jugar con los ibicencos. Por ello es necesario que tome las medidas adecuadas para protegernos de los sinvergüenzas que tratan de impedir que se les multe por correr y pase a utilizar de una vez radares de mano como los que utiliza la policía local de Santa Eulalia.
Vivimos en una isla llena de palurdos. Lo cojo y lo reviento a porrazos si soy policía
Una cámara de seguridad discreta y al trullo con el sinvergüenza. Las carreteras de Ibiza son un DROGÓDROMO donde hacen carreras un monton de HDP que pueden matarnos en cualquier momento. Mano dura y los recursos que hagan falta. Nos va la vida por culpa de unos cuantos cabrones.
Una cámara de seguridad, si claro, asi de facil, como que el autor lo hace a cara descubierta y si se acerca en coche a matricula descubierta tambien.
Teneis unas ideas brillantisimas, si, ciertamente.