Aunque la lucha contra la plaga de serpientes que afecta a Ibiza y amenaza con extinguir su lagartija endémica viene de lejos, hay personas que todavía no han instalado trampas en sus terrenos de manera preventiva. Ya sea por falta de recursos, por miedo a manejar las capturas o porque no están en los canales informativos habituales o no tienen contacto con los organismos que trabajan en esta lucha o con los ayuntamientos, lo cierto es que hay personas que necesitan más apoyos para sumarse a la causa.
El conocido voluntario caza serpientes Dean Gallagher ha decidido dar un paso más contra la plaga y regalará trampas gratis a personas vulnerables y sin recursos.
La empresa Fita Ibicentro pone la mano de obra gratuitamente para apoyar esta campaña de Gallagher, que recaudará fondos para pagar materiales y, además, contactará con el máximo número de personas para tratar de llegar a todos los rincones y ofrecerse a gestionar las trampas y las capturas.
Gallagher ya ha puesto en marcha la campaña en Gofundme para recaudar fondos para esta causa, que se destinarán al cien por cien a la construcción de trampas, compra de ratones y de comida para los roedores que hacen de cebo para las serpientes (hay que recordar que los ratones solo atraen a las serpientes, que no se los pueden comer porque están en una sección separada de la trampa).
Esto dará acceso a trampas a muchas más personas, incluso aquellas indecisas o que no tienen contacto con los organismos oficiales que se dedican a ello.
Entre ellas hay muchos ibicencos y también extranjeros que Gallagher conoce directamente y a los que les puede hacer llegar las trampas. «Valoraré caso por caso, porque obviamente es para personas con menos recursos y dificultades», matiza.
«Actualmente están haciendo dos o tres trampas a diario en la carpintería y esperamos tener una buena cantidad, la mayor posible, para abril, que es un buen mes para instalar las trampas en Ibiza, ya que con la primavera aparecen más serpientes por la isla al salir de la hibernación», explica el voluntario.
Se trata, dice Gallagher, «de cubrir todos los sitios, de llegar a todas las casas y a todos los terrenos para que esta lucha tenga un desenlace positivo, con más serpientes cazadas y más lagartijas protegidas».
«Muchísimas personas buenas de la isla han participado en la protección de nuestras lagartijas endémicas en peligro comprando e instalando trampas. Otros voluntarios también han ayudado acercándose a las diferentes asociaciones y contribuyendo de muchas maneras. La situación sería mucho peor sin su ayuda», añade el voluntario en la campaña.
«La situación es crítica para nuestras lagartijas y mi objetivo es cubrir las brechas en la isla y llegar a más personas, no solo a quienes pueden permitírselo o tienen la confianza para participar», subraya.
El modelo que están haciendo en Fita es igual de eficaz y de resistente que otros que se han repartido.
«Tenemos que llegar a personas y a lugares donde no habíamos llegado, Hay personas que tienen dinero, tiempo o coraje para poder gestionar esto, pero hay personas solas, mayores, que viven en lugares aislados y no tienen mucho dinero ni conocimientos para tener una trampa en su casa», argumenta Gallagher que insiste en que «esta lucha merece toda nuestra atención».
«Hay que dar las gracias a todos los voluntarios y voluntarias y a todas las personas que se han implicado porque, de lo contrario, la situación sería muchísimo peor. Esto que presentamos ahora es una herramienta más para colaborar juntos, todos, en esta lucha. Somos una comunidad y tenemos que luchar unidos», concluye Dean Gallagher.
