El despacho de abogados Trader&Justicia ha iniciado actuaciones penales contra el bróker online Octigon en el Juzgado de Instrucción nº 4 de Ibiza por la presunta estafa denunciada por un ciudadano ibicenco, según informan a Noudiari.
Felipe Martín, socio del despacho Trader&Justicia y quien ha puesto la querella explica a Noudiari que la cantidad estafada es de 95.000 euros y que los hechos sucedieron en 2021. La querella se puso en octubre de 2021 y ahora está pendiente de incoarse.
«Este caso sigue el modus operandi habitual: el bróker hace creer al cliente que trabaja en una plataforma legal y regulada y que está ganando mucho dinero. Les reportan informes y el cliente pone más dinero en la inversión… hasta que se destapa que todo ha sido una estafa», relata.
“Toda la mecánica de funcionamiento de las inversiones es simulada y el capital es directamente apropiado por el bróker sin realizar ninguna inversión real”, afirma.
El despacho también ha iniciado actuaciones contra otros tres brókers online o plataformas de inversión por presunto fraude contra sus clientes en San Sebastián, Tudela o Madrid.
Felipe Martín reconoce que es «muy difícil seguir el rastro del dinero, dado que los estafadores utilizan estructuras financieras internacionales para hacer desaparecer las pistas del destino final del dinero» pero asegura que «los juzgados españoles son plenamente competentes para la investigación y persecución de este tipo de delitos», por lo que recomiendan «iniciar las pertinentes actuaciones judiciales, e intentar encontrar a los responsables de las estafas”.
Según se ha detectado desde el despacho, en los últimos tiempos vienen proliferando plataformas de inversión no reguladas comúnmente denominados, “chiringuitos financieros”, cuyo único objeto es servir de instrumento para estafar al mayor número de personas posible antes de desaparecer. Se trata de plataformas que ofrecen supuestos servicios de inversión sin estar autorizadas para hacerlo, actuando al margen de la legalidad.
Es habitual que estos brokers no regulados prometan un enriquecimiento rápido y sin riesgos con el ánimo de llevar a error a los inversores, haciéndoles creer que están invirtiendo en un producto de inversión real, como, por ejemplo criptomonedas, cuando lo cierto es que no existen ninguna inversión, explica el socio de Trader&Justicia.
Estos presuntos estafadores están especializados en persuadir a sus víctimas para que inviertan más y más dinero, haciéndoles creer que son sus amigos. Tienen grandes habilidades sociales y consiguen embaucar a personas de todo tipo y condición. No son expertos en mercados financieros y sus nombres son ficticios. “Son estafadores profesionales”, advierte Felipe Martín.
Una vez se ingresa un primer importe en la plataforma, habitualmente, el interlocutor hace creer a su víctima que está consiguiendo grandes beneficios, con el fin de que se ingresen más y más importes, hasta que consiguen vaciarle sus cuentas.
Los problemas aparecen cuando se solicita retirar capital de la plataforma. Es en este momento cuando el fraudulento bróker comienza a utilizar distintas tretas para que el inversor realice todavía más ingresos, tales como un impuesto o una comisión para intentar retirar los presuntos beneficios.
En cualquiera de los casos, se caiga o no se caiga en esta última técnica de engaño, el bróker desaparece y deja de responder a los mensajes del cliente, apropiándose definitivamente de la totalidad de las cantidades ingresadas.