La contribución de la aviación comercial, en general, al cambio climático va en aumento, pero el papel global de la aviación privada, en concreto, todavía no está bien cuantificado. Arrojar luz sobre ese impacto es el objetivo de un estudio publicado este mes de noviembre en la prestigiosa revista Nature y titulado Private aviation is making a growing contribution to climate change (La aviación privada está contribuyendo cada vez más al cambio climático) de Stefan Gössling, Andreas Humpe y Jorge Cardoso Leitão.
En él, destacan, entre otros, el caso de Ibiza, ya que es un aeropuerto con tráfico creciente de jets privados, vinculados especialmente al ocio y a las vacaciones, frente a otros aeropuertos que sufren más presión por viajes de negocios o por grandes acontecimientos globales.
Tras investigar los viajes con fines de ocio en Ibiza y en Niza, Francia, han comprobado una clara tendencia estacional de visitas que alcanzan su punto máximo en verano. Las llegadas también se concentran en los fines de semana (llegadas los viernes, salidas los domingos), «lo que sugiere que los motivos de viaje están dominados por el ocio», indican. En Ibiza, la afluencia es mayor durante el verano (de junio a agosto).
Han calculado, además, las emisiones de CO2 de toda la aviación privada mundial y han hecho un seguimiento de vuelos entre 2019 a 2023, destacando que la aviación privada contribuyó con al menos 15.6 Mt de CO2 (15.6 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono) en emisiones directas en 2023, lo que es aproximadamente 3.6 toneladas de CO2 por vuelo. Las emisiones directas totales de 15,6 Mt de CO2 en 2023 representan entre el 1,7 % y el 1,8 % de las emisiones de CO2 de la aviación comercial. Se espera que la industria entregue otros 8.500 jets privados en el período 2024-2033. «Así, es probable que la aviación privada se convierta en una fuente de emisiones cada vez más importante», alertan.
Los jets analizados consumen entre 182 y 2.180 litros por hora, lo que implica que emiten más CO2 por hora que una persona promedio en todo un año (4.5 t de CO2e en 2020). Además, las emisiones han aumentado un 46% entre 2019 y 2023, y la industria espera un fuerte crecimiento continuo «por lo que se necesita regulación para abordar el impacto climático creciente del sector».
La aviación privada (AP) la usan 256.000 personas de todo el planeta, es decir, el 0.003% de la población adulta mundial. Se trata de ultra ricos, con un patrimonio promedio de 123 millones de dólares y una riqueza combinada de 31 billones de dólares. Aunque las aeronaves privadas no solo son propiedad de una persona o corporación, sino que también se usan mediante vuelos chárter bajo demanda, programas de membresía o propiedad fraccionada, destaca el estudio.
El análisis muestra, por tanto, que los individuos que utilizan la aviación privada «emiten desproporcionadamente más que una persona promedio». «Supervisar la aviación privada es fundamental para entender y gestionar el sector. Esto podría volverse más complicado en el futuro, ya que el uso de la aviación privada está creciendo», añaden.
Pero, ¿quién controla esto? El propio estudio admite que «el transporte aéreo privado ilustra el dilema político de abordar el rol de los más adinerados, ya que los legisladores son reacios a centrarse en los ricos y poderosos».
El estudio revela que a finales de 2023 había un total de 25.993 aeronaves privadas en servicio que, a lo largo de 2023, realizaron 4.301.561 vuelos individuales (tramos) y que la mayoría fueron de menos de 500 kilómetros por trayecto.
También que el 18,9 % de los vuelos son más cortos (<200 km), y que muchos son vuelos vacíos, de entrega o de recogida. Los hallazgos también confirman que la aviación privada se utiliza de manera rutinaria y, en muchos casos, parece reemplazar al automóvil para ahorrar tiempo o por conveniencia, como lo demuestra el 4,7 % de vuelos son muy cortos, de menos de 50 km. Como muestran los picos de llegadas estacionales y semanales en destinos vacacionales populares, como Ibiza, muchos vuelos se realizan exclusivamente con fines recreativos
Los ricos del norte contaminan el planeta
La mayoría del tráfico aéreo privado es dentro de EE. UU., seguido por Europa. Las capitales de Centroamérica (Ciudad de México, Ciudad de Guatemala, San José y Ciudad de Panamá), así como el Caribe (Turcas y Caicos, Anguila, Barbados, Cancún), son frecuentadas, al igual que el Medio Oriente.
El transporte aéreo privado es menos común en China y el sudeste asiático, Oceanía, América Central y del Sur, excepto en Brasil y algunas capitales (Caracas, Bogotá, Montevideo, Buenos Aires). África muestra un uso limitado del transporte aéreo privado, con excepción de Sudáfrica y Nigeria. Algunas islas, como las Hawái, el Caribe, las Canarias, Cabo Verde y destinos remotos como Maldivas, Seychelles, Mauricio o la Polinesia Francesa, atraen mucho transporte aéreo, destaca el estudio.
En el mapa que han elaborado se puede ver claramente que el tráfico y sus correspondientes emisiones, se concentran en la mitad norte del globo.
EE. UU. alberga el 4% de la población mundial, pero el 68.7% de todas la aviación privada está registrada en este país.
El análisis revela que ciertos eventos globales atraen considerable actividad de transporte aéreo privado: el Foro Económico Mundial en Davos, Suiza; la Super Bowl en Arizona, EE. UU.; la Conferencia COP28 en Dubái y el Festival de Cine de Cannes en Francia.
También destaca que los diez modelos más populares de avión privado representan alrededor del 40% de la flota total. El más común es el Pilatus PC-12 con una cuota de mercado del 8%, seguido del Bombardier CL-600 Challenger y el Piper PA-46-500TP. Muchos de ellos sobrevuelan y aterrizan en Ibiza a un ritmo creciente año a año e incluso han sido objeto de acciones contra el cambio climático.
El artículo completo se puede leer en este enlace de Nature.
Gössling, S., Humpe, A. & Leitão, J.C. Private aviation is making a growing contribution to climate change. Commun Earth Environ 5, 666 (2024). https://doi.org/10.1038/s43247-024-01775-z
Nature es una revista científica de gran prestigio cuyos artículos ven a luz una vez pasados muchos filtros de otros profesionales que avalan su contenido. Quienes publican en ella son científicos reconocidos, rigurosos y muy cualificados en sus campos cuyos trabajos se deberían tomar en consideración. Llama mucho la atención que sea un territorio tan exiguo como Ibiza que a nivel mundial soporte el mas alto exponente de contaminación por jets privados del mundo. Y que ello lo mueva una banalidad (no una necesidad) como es el ocio y el lujo. ¡¡Que pena das querida Ibiza!!. DECRECIMIENTO YA!!!