Unas 100.000 personas asisten hoy al funeral del papa emérito Benedicto XVI, que ya está celebrando (comenzaba a las 9.30 horas de la mañana de hoy) en la plaza de San Pedro del Vaticano. Entre ellos está el ibicenco Sergi Lleó.
Lleó, que ha encabezado las denuncias por abusos sexuales cometidos presuntamente por un sacerdote de Ibiza, ha querido viajar a Roma como una forma de visibilizar este caso y a la vez despedir al que se considera el primer papa que encaró el tema de los abusos sexuales en la Iglesia católica.
El ibicenco no ha dormido para poder garantizarse un asiento en la ceremonia, «ya que las colas eran muy largas ya durante la madrugada», con lo que ha preferido no descansar en el hotel y quedarse como tantos otros peregrinos y fieles toda la noche en blanco para poder asistir a la histórica ceremonia.
Desde allí ha enviado varias fotos y vídeos a Noudiari.
Una densa niebla y bajas temperaturas han acompañado durante la madrugada a peregrinos y fieles.
La misa está presidida por el papa Francisco y celebrada por el decano del Colegio Cardenalicio, el italiano Giovanni Battista Re y concelebrada por unos 120 cardenales, 400 obispos y 4.000 sacerdotes.
En la plaza de San Pedro ya han tomado asiento a esta hora las delegaciones oficiales que serán dos, la de Italia y la del país natal de Ratzinger, Alemania, al no considerarse un funeral de Estado ya que Benedicto XVI dejó de ser el Jefe de Estado vaticano tras su renuncia en 2013.
Tal y como ha podido comprobar el propio Lleó, la delegación de Gobierno de Roma ha efectuado un importante despliegue de seguridad, con más de 1.000 agentes y el cierre del espacio aéreo sobre la plaza, dada la presencia de decenas de miles de personas.
La reina emérita de España, doña Sofía; el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños; el presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Juan José Omella, y la embajadora de España ante la Santa Sede, Isabel Celaá, son algunas de las autoridades que asistieron a la capilla ardiente ayer y que hoy están presentes en el funeral.
Benedicto XVI dejó de ser jefe de la Iglesia católica y del Estado Vaticano tras su renuncia en febrero de 2013.