Julian Cobby, padre de Theo, un niño con Síndrome de Smith-Magenis, una enfermedad genética rara que se caracteriza por tener una discapacidad intelectual leve a moderada, retraso en el habla y trastornos del sueño, se ha puesto en contacto con Noudiari y otros medios de Ibiza para denunciar que el pequeño se ha quedado sin plaza en las escuelas de verano de Sant Josep.
«Este año he pedido plaza para mi hijo y su hermano pequeño en la Escuela de Verano municipal del Ajuntament de Sant Josep y no han obtenido plaza ninguno de los dos. Tanto su madre como yo trabajamos, como es el caso de otras familias, pero en nuestro caso tenemos un hijo con discapacidad, con lo cual tenemos muchas más dificultades ya que no lo podemos dejar en cualquier sitio», relata.
Explica que sufren la carga de tener muchos gastos derivados de la discapacidad de su hijo y de las terapias que necesita y, por ello, no pueden contratar a una niñera «un servicio que es mucho más caro y que, además, le impediría el contacto con iguales, algo que es tan importante para él», subrayan. «Si no podemos dejar de trabajar, ¿qué hacemos?», se pregunta el padre, desesperado.
«Nuestro hijo va a una escuela pública y está en un aula ordinaria con el resto de sus compañeros y compañeras», relata.
Para Theo es «muy importante» la socialización con otros niños y poder hacer diferentes actividades «que suponen una gran estimulación para él», afirman.
«Todas las escuelas de verano públicas y privadas ya están completas y nos encontramos desesperados», subrayan.
«Consideramos que el Ayuntamiento de Sant Josep (y el resto de ayuntamientos) deberían asegurar siempre una reserva de plazas que sea suficiente para poder aceptar a todos los niños que tienen discapacidad. Las instituciones tienen la obligación de garantizar la atención y el derecho a la inclusión de niños con necesidades especiales», concluye el padre.