NouDiari / El presidente del Consell Insular de Ibiza, Vicent Marí, ha mantenido reuniones esta mañana con agentes sociales y con los alcaldes y alcaldesa de la isla de Ibiza para abordar el retroceso de la isla de Ibiza a Nivel 3 por la alta incidencia de la pandemia.
«Todo el camino que habíamos avanzado lo hemos perdido en poco más de 15 días», ha manifestado el presidente.
«Ante estas circunstancias, el Govern balear se ha visto obligado a aplicar medidas restrictivas, que son duras, pero que se tienen que cumplir para superar esta dolencia, por eso apelamos a la responsabilidad individual; esta lucha no solo es de las instituciones, es de todos, se trata de salvar vidas y garantizar que no se saturen los recursos asistenciales de nuestro sistema de salud», ha dicho en la comparencia posterior.
Marí ha hablado de la necesidad de convocar una junta con la Delegación del Gobierno central y los alcaldes para mejorar la coordinación entre todos los ámbitos policiales.
Marí ha explicado: «todas las policías están trabajando, pero en las reuniones de hoy me han manifestado que puede haber carencia de coordinación en algunos momentos, que pueden suponer el incumplimiento de las normas y, en consecuencia, el aumento de la incidencia de la dolencia».
Caos en los controles
Por otro lado, el presidente ha apuntado la necesidad de mejorar los controles a puertos y aeropuertos.
«Nos consta que en los últimos días ha habido quejas por falta de personal, coordinación e información«, por eso el presidente ha indicado que pedirá a las administraciones implicadas «un esfuerzo para corregir estas situaciones».
En lo que respecta a la campaña de vacunación, cuyo arranque se ha atrasado en Ibiza, Marí reclama al Govern balear «que se recupere el retraso acumulado para cumplir estrictamente con el calendario previsto inicialmente para la comunidad autónoma y con los esfuerzos que sean necesarios», ha insistido.
Finalmente, los empresarios han manifestado la necesidad de convocar líneas de ayuda que sean «ágiles y eficaces» para paliar los efectos de la crisis.
«Pediremos en el gobierno central y en otras administraciones la aplicación de medidas fiscales para aquellos negocios afectados directamente», ha manifestado Marí.
«La hostelería no es culpable de esta situación; hay que ser conscientes de la necesidad de reducir la actividad social, y esta es la única finalidad de las normas que entrarán en vigor el próximo 7 de enero», ha concluido.