La plaza de obispo de Ibiza, que ha estado vacante durante un año y ocho meses (desde enero de 2020), la ocupará finalmente el ibicenco Vicente Ribas Prats, hasta ahora administrador diocesano de la isla.
Será el quinto obispo nacido en Ibiza que ocupa el cargo. El último ibicenco fue Antonio Cardona Riera y de eso han pasado ya 61 años.
Ribas Prats, nacido el 12 de mayo de 1968 en Ibiza. Fue ordenado el 12 de octubre de 1996 en la Catedral por el obispo Javier Salinas. Comenzó su ministerio pastoral como vicario de la Parroquia de Santa Cruz de Ibiza entre los años 1996 y 2000. Un año después fue nombrado capellán del Colegio Sa Real, y posteriormente Delegado de Pastoral Vocacional.
En el año 2000 fue nombrado párroco de Santa Gertrudis y San Mateu y Administrador Parroquial de Sant Miquel.
En el año 2006 fue nombrado Párroco de Sant Miquel, miembro del Consejo de Consultores y Arcipreste del Arciprestazgo de Santa Eulària. En el año 2008 fue nombrado Párroco de Santa Eulària, siguiendo como párroco de San Mateo.
En el año 2009 fue nombrado canónigo de la S.I. Catedral y el 15 de septiembre de 2010 fue nombrado Vicario General de la Diócesis.
En enero de 2020 el Colegio de Consultores, ejerciendo las facultades que le reconoce el Código de Derecho Canónico, eligió a Vicente Ribas Prats como Administrador diocesano para que atendiese los diferentes asuntos de la Diócesis hasta el nombramiento de un nuevo obispo.
Ribas Prats sustituye en el cargo a Vicente Juan Segura, que fue nombrado el 22 de enero de 2005 obispo de Ibiza por Juan Pablo II y recibió la ordenación episcopal y tomó posesión de la sede el 14 de mayo del mismo año.
El 18 de enero de 2020, el papa Francisco nombró a Vicente Juan Segura cuarto obispo auxiliar de Valencia cuyo titular es el cardenal Antonio Cañizares, lo que se consideró en diversos foros relacionados con la religión católica como una degradación ya que había ocupado durante 15 años una plaza de obispo residencial. Otras voces apuntaron a razones familiares.