NouDiari / El Ayuntamiento de Ibiza ha iniciado las obras del futuro albergue para indigentes previsto en las instalaciones de la escuela de adultos CEPA Pitiüses, junto al Mercat Nou.
Lo ha hecho desoyendo las peticiones de todos los sindicatos educativos de Ibiza, sin excepción, de la Asamblea de Docentes del propio centro y sin tener en cuenta el informe técnico solicitado por los profesores (ver pie de página), que alude a posibles irregularidades en el proyecto municipal, que podría ser denunciado en los juzgados.
Al parecer, el uso de dichas instalaciones es exclusivamente educativo, según recoge el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Ibiza. Esto quiere decir que para poder llevar adelante esta obra, que ya ha empezado, sería necesario cambiar la calificación de este espacio, de forma parcial o total, con la redacción de un proyecto que nada tiene que ver con el que ha elaborado el consistorio, de obra menor. Éste debería pasar, del mismo modo, un periodo de exposición pública que tampoco ha existido.
Una serie de pasos ineludibles conforme a la normativa y la legalidad, en definitiva, que el Consistorio se habría saltado alegremente, según recoge el informe técnico que aparece bajo estas líneas y que puede servir de base argumental de una denuncia en los tribunales.
La Asamblea del CEPA Pitiüses defendía el centro de lo que considera una amenaza externa con consecuencias graves para el alumnado y la capacidad de plazas, puesto que con esta modificación se pierde un tercio del espacio del que dispone la escuela de adultos de Ibiza, desde donde se gestiona también la de Formentera y la del centro penitenciario de Cas Mut.
El centro cuenta con más de 700 alumnos, necesita ganar espacio en vez de perderlo, como ocurrirá con la puesta en marcha del albergue, dado el alto número de matrículas, que ha ido en aumento en los últimos años, y el hecho de que ya hay alumnos que se quedan fuera por falta de espacio en aulas con capacidad para solo 15 personas.
Los docentes no tenían nada en contra del proyecto ni entraban a valorar la necesidad o no de esta instalación para los sin techo, únicamente cuestionaban su ubicación y pedían que se buscara un lugar adecuado y sin perjuicio de terceros.
Sin embargo, el Ayuntamiento de Ibiza les ha ignorado en todo momento, y más después de que levantaran la voz defendiendo las necesidades educativas de la enseñanza de personas adultas, que siempre sale perjudicada, lamentan.
Tampoco la delegada de Educación de Ibiza, Margalida Ferrer, del mismo partido que el alcalde de la ciudad de Ibiza, Rafa Ruiz, ambos del PSOE, ha velado por los intereses del centro, según miembros de la Asamblea, que creen que, otra vez, ha tenido mayor peso el color y la finalidad política de los actores implicados en esta decisión que la educación en sí misma.
Ayuntamiento comunista, depostata y tirano.
Babuino!! Que vives en otra época…
Este ayto da pena. Chulos y malcriados.
Cuesta entender qué motivo tienen en aplicar el rodillo y no hacer caso a las reclamaciones. Y todavía más teniendo en cuenta que la escuela de adultos podría ser parte de la solución para atender a estas personas en riesgo de exclusión social. Aplicar la capacidad de conversar y acordar , en vez de imponer, parecería lo más sensato…
Solo para que lo sepáis los miembros de la Asamblea del CEPA, el director del centro os vendió de forma cobarde, miserable y silenciosa. Ahora me he enterado de que es su estilo.