@Noudiari / La reputación es uno de los conceptos más volátiles que existen: se esfuma en cuestión de segundos sin importar el esfuerzo que se ha dedicado en forjarla. Internet ha conseguido que las opiniones, ya sean negativas o positivas, viajen a cientos de miles de kilómetros. Algo que no parece importar al Ayuntamiento de Eivissa, que ha dado el pistoletazo de salida de la temporada turística que marca el 1 de mayo entre basura y obras. Y sin servicios en las playas.
La capital ibicenca es conocida por su versatilidad. Dentro de una pequeña urbe se encuentran pequeños rincones como las playas de Talamanca o ses Figueretes, que forman uno de los atractivos indudables para el turista. Sin embargo, el Consistorio no ha licitado todavía las concesiones de los servicios de playa. Estos enclaves han amanecido enmarañados por una profunda capa de posidonia y sin hamacas, sombrillas o cualquier otro atractivo para los primeros visitantes del curso.
La institución también necesita mejorar en la gestión del tráfico y de las obras municipales en las principales arterias de la ciudad. Los aparcamientos disuasorios han sido una tirita para un problema endémico de los últimos años como el caos circulatorio en Vila, agravado por la mala previsión en las obras y reformas que debe acometer el Ayuntamiento. La Ronda del Fratín o la plaza de la Catedral están en obras, al igual que la avenida de Espanya, una de las principales arterias de Eivissa y que cuenta en muchos tramos con un único carril, lo que provoca grandes atascos aunque no se trate de las horas punta del día.
La nefasta previsión del Ayuntamiento se ha evidenciado también en el derribo de Santa Margalida Sud, al no solicitar en su momento la retirada del cableado eléctrico. Un ‘patinazo’ que provocará retraso en los trabajos, con más polvo y ruido en la zona en los meses de mayor actividad. Una medida que se trató de subsanar permitiendo trabajos en fin de semana y festivos. En definitiva, más molestias para los residentes y una pésima imagen para el visitante.
Además, el puerto de Vila y el paseo Juan Carlos I también están en obras y se ha visto afectada la avenida de Santa Eulària, otra de las calles de acceso a la ciudad, y una zona muy turística por estar situada junto a un hotel de lujo.
Otro de los puntos negros de la gestión del equipo de gobierno de PSOE y Guanyem ha sido la de los residuos. Tampoco ha sido diferente para los turistas, que han paseado entre cajas, escombros y basura por lugares tan concurridos como la avenida de Isidor Macabich o la Marina, como se observa en las fotos.
Rafa Ruiz style y el teniente de alcalde Alfonso Molina entre acusaciones de corrupción.Un auténtico caos.
El alcalde está gentrificando el centro de ibiza como zona VIP, con alquileres estratosféricos y desaparición de negocios de toda la vida, mientras nos llena de obras y mierda la ciudad…Pretenden así atraer al turismo de lujo? Qué ganas que se acabe esta nefasta legislatura!!
Con obras o sin obras, la plaga de guiris está asegurada.
Pandilla de inútiles. SOLO VENDEN HUMO. Ahora solo faltaban los indicios de corrupción en que están inmersos.
Cualquiera diría que éstos pretenden hundir a propósito La Marina y por encima, a la absurda forma de peatonalizar y redireccionar calles unen ahora una carrera de obstáculos en av. España. Me gustaría saber a favor de qué intereses están actuando.