@Vicent Torres / La ponencia para votar en el Congreso la reforma del Código Penal que aumentará las penas para los conductores homicidas se ha aplazado una semana por discrepancias entre los diferentes partidos políticos.
Los puntos más sensibles hacen referencia a algunas reivindicaciones de los familiares de las víctimas en accidentes de tráfico en los que se vieron involucrados conductores que dieron positivo por drogas y alcohol.
En este sentido, la diputada de Ciudadanos, Irene Rivera, es la que está presionando más al Gobierno y al Partido Popular para que acepten la introducción de dos cambios en el texto. Las claves son la consideración de delito de las lesiones del artículo 147.1 del Código Penal, las que tienen una consideración menos grave, y que se aumenten las penas en un grado cuando haya un fallecido, y no más de uno como consideraba el principio de acuerdo.
Los familiares de las víctimas están sorprendidos por el cambio que ha dado el Partido Popular sobre la consideración de las lesiones del artículo 147.1 y temen que el Gobierno no ceda y que acabe bloqueando este asunto.
«Las víctimas están totalmente desamparadas en estos casos. Y puede quedar así por cálculos que no tienen nada que ver con la protección de los débiles ni con la justicia, si no que se trata de si se saturarán o no los tribunales», ha lamentado el secretario general de la Asociación de Ciclistas Profesionales (ACP), Alfonso Triviño.
La reforma que estaba prevista votar entre ayer y hoy eleva a nueve años la pena de cárcel por imprudencia al volante y la introducción del delito de abandono del lugar del accidente.
#PorUnaLeyJusta solicita que cuando un conductor, por alcohol, drogas o exceso de velocidad… provoca 1 “SOLO” fallecido; se eleven las penas mínimo en un grado, de 4 a 6 años de prisión.#vadepersonas https://t.co/iU4bQsxzly
— Anna González López (@ANNAGONZALEZLO1) 10 de noviembre de 2018