Una quema de rastrojos que se hizo ayer y que, al parecer, no estaba bien apagada, se ha reavivado esta mañana sin que hubiera nadie vigilando.
De este modo, las llamas han prendido de nuevo, se han descontrolado y han acabado afectando a 500 metros cuadrados de masa forestal que han ardido dentro de una urbanización ubicada a la altura del número 33 de la avenida de Cala Llonga de Santa Eulària.
Los hechos han sucedido sobre las 13.20 de este miércoles.
Así informan desde el Parque Insular de Bomberos de Ibiza, que han actuado junto al Ibanat en la extinción de las llamas.
Por parte de los bomberos han acudido siete efectivos en dos vehículos, mientras que el Ibanat ha aportado cinco brigadistas y un agente de Medio ambiente, además de vehículos.