Pasar de ‘bienes inmuebles o cosas’ a ‘seres sintientes’, regular la ‘custodia compartida’, aparecer en un testamento o evitar que puedan ser utilizados como una herramienta más para ejercer la violencia de género, son algunos de los aspectos recogidos en la nueva normativa sobre las mascotas que entró en vigor el pasado 5 de enero.
Todos estos puntos que favorecen el respeto a los animales desde diferentes ámbitos de la vida se tomarán en cuenta desde ahora tras la modificación del Código Civil, la Ley Hipotecaria y la Ley de Enjuiciamiento Civil sobre el nuevo régimen jurídico de los animales, y que ha sido aplicada por primera vez en España por una jueza de Oviedo al autorizar que un can viva con su cuidadora ante el desentendimiento de su dueño.
Esta reforma legislativa «no va a favor de los animalistas y en contra de quienes no lo son», sino que se basa en «en aquellas personas que respetan a los animales y sobre las que no porque a ti puede no gustarte un perro o un gato, pero puedes pasar por la calle y no tienes por qué pegarle una patada», explica a Efe la portavoz de la Asociación Parlamentaria en Defensa de los Derechos de los Animales (APDDA), Sandra Guaita.
Custodia compartida
Estos cambios en la legislación evitarán -por ejemplo- que los animales de compañía se entreguen en caso de embargo de una casa, indica Guaita, o que los servicios de emergencias estén obligados a rescatar también a los animales tras un accidente de tráfico.
Otro aspecto «importante» que se ha abordado con la reforma, según esta experta, recae en la regulación de la custodia compartida de los animales en caso de separación y divorcio o que formen parte de un testamento cuando fallece una persona.
Violencia
Una última modificación «bastante importante» pasa por la inclusión de un apartado para que los animales «no sean utilizados como una herramienta para ejercer la violencia de género», apunta.
«A veces cuando el agresor está maltratando a su pareja además de emplear herramientas físicas usa las psicológicas», subraya Guaita, quien menciona que «una muy clara son los hijos, que ya está sumamente tipificado, y otra que están viendo los jueces y fiscales son los animales».
El «vínculo emocional» de una mujer maltratada con su mascota puede ser estrecho por la situación que sufre, y «ya ha habido casos reales en los que el agresor ha acabado asesinando al animal».
Normas
Jurídicamente esta era una modificación «absolutamente necesaria e imperativa» para adecuar la legislación civil al resto de normas del ordenamiento jurídico español, así como al Derecho Europeo, que ya reconocía a los animales como seres con capacidad de sentir y no cosas, declara a Efe la abogada especializada en Derecho y Animales y vocal de la organización de operadores jurídicos por los animales (INTERcids), María González.
Según González, este anacronismo ha sido enmendado en el Código Civil «la norma en la que, en nuestro Derecho, debía decirse que los animales son seres sintientes y no cosas», una situación «tan obvia» que ha sorprendido a muchas personas.
Vínculo afectivo
Recuerda que cada vez hay más personas que buscan la compañía de animales en sus hogares, por lo que todo lo que ha conllevado esta reforma respecto al reconocimiento del vínculo afectivo que se establece hacia las mascotas también ha sido bien recibido, precisamente porque se da respuesta ese «sentir de la gente».
Para González, la repercusión mediática producida por la jueza de Oviedo que ha estrenado este «nuevo Código Civil» y su nueva consideración respecto a los animales ha permitido «constatar que ya empieza a aplicarse y que sí, sin duda nos traerá muchos más pronunciamientos judiciales».
Rafa González / EFE
Muy bien, ya era hora.