@Noudiari/ El escritor Ben Clark ha lamentado el fallecimiento del también escritor y amigo, Manel Marí.
«La muerte de un amigo es una tragedia personal. La muerte de un poeta es una tragedia para la sociedad. Con Manel Marí muere un amigo y un gran poeta y sólo puedo decir que me recorre el dolor y la rabia por el tiempo arrebatado», señala Clark.
Clark apunta que con la muerte de Marí, Eivissa pierde «una de sus principales voces líricas, y la pierde demasiado pronto».
«Manel fue siempre generoso conmigo, recuerdo sus consejos y, sobre todo, que aceptara viajar desde Valencia expresamente para presentar mi primer libro, en noviembre de 2001, en la biblioteca pública de Santa Gertrudis. Entonces Manel me parecía un poeta mayor, pero ahora me doy cuenta de que debía tener 26 años (yo tenía 17). Ahora, sin embargo, me parece joven, jovencísimo, demasiado joven y demasiado padre, demasiado compañero, demasiado amigo y demasiado poeta para morir», recuerda Ben Clark.
«Maldita sea la muerte y viva la poesía de Manel Marí», concluye.