Un conductor chocó y tumbó anoche una farola con su coche en la Avenida de Sant Agustí, en el municipio ibicenco de Sant Josep de sa Talaia, y, en vez de dar cuanta del suceso, huyó del lugar del siniestro.
Poco después, otro vehículo que circulaba por la misma vía impactó contra la farola, que había quedado tirada encima de la calzada. La Policía Local de Sant Josep localizó, poco después, al causante del primer siniestro, que se había refugiado en su casa, a solo kilómetro y medio de donde se había producido el accidente, con el coche aparcado.
Los agentes pudieron dar con él porque, en el impacto, la matrícula de su vehículo quedó tirada en el suelo, así como por los testimonios de diversas personas que observaron el accidente.
En su cuenta de Facebook, la Policía Local de Sant Josep advierte del peligro que supone para otros conductores este tipo de actuaciones, puesto que, si en vez de otro coche, el vehículo que hubiera impactado con la farola que quedó tirada sobre la calzada hubiese sido una moto el resultado podría haber destrozado la vida de muchas personas, la suya incluida.