El Museo de la Liberación de París acoge desde el 8 de marzo hasta el 31 de diciembre la muestra Mujeres fotógrafas de guerra, una selección de imágenes de ocho reporteras gráficas fundamentales en la historia reciente, que han cubierto 75 años de conflictos bélicos por todo el mundo.
Una de las ocho fotógrafas seleccionadas y una de las tres que viven en la actualidad es Christine Spengler, reportera gráfica francesa de enorme talento que desde hace décadas reside en Ibiza, donde está siempre muy presente en la vida cultural de la isla y donde ha protagonizado también exposiciones con su propio trabajo.
Es más, el director de cine y gestor del festival Ibizacinefest, Xavi Herrero, le dedicó el documental Moonface, una mujer en la guerra que recibió la Biznaga de Plata 2019 de la sección ‘Afirmando los derechos de las mujeres‘ del Festival de Málaga.
Su nombre y su obra figura junto a otras fotógrafas excepcionales como Lee Miller (1907-1977), Gerda Taro (1910-1937), Catherine Leroy (1944-2006), Françoise Demulder (1947-2008), Susan Meiselas (nacida en 1948), Carolyn Cole (nacida en 1961) y Anja Niedringhaus (1965-2014).
Spengler, mujer de conversación brillante, divertida y siempre reconocible por sus estilismos coloridos e irrepetibles, cuenta con un pasado fascinante. Después de estudiar idiomas, se fue a Chad, donde se convirtió en fotógrafa de guerra. Cubrió conflictos como el del Irlanda del Norte en 1972, trabajó en lugares de Asia como Vietnam y Camboya, en África (en el Sáhara Occidental), en Oriente Medio, en Afganistán e Irak. Ha trabajado para agencias internacionales como Corbis Sygma, Sipa Press y Associated-Press.
La muestra en su conjunto ofrece 80 fotografías de las ocho protagonistas, además de documentos, periódicos y revistas originales donde se publicaron las fotos.
El objetivo último de la iniciativa es destacar la implicación de las mujeres en todos los conflictos, ya sean combatientes, víctimas o testigos, según destaca el museo que ha coordinado la muestra con el Museo General Leclerc, Museo Jean Moulin y el Kunstpalast de Düsseldorf.
“Si bien la fotografía de guerra es una profesión dominada por hombres, muchas fotógrafas han trabajado en zonas de guerra documentando crisis globales y jugando un papel decisivo en la configuración de la imagen de la guerra”, relatan desde el museo. El tema de la exposición, urdido desde hace meses, se ha vuelto tristemente de absoluta actualidad por la guerra de Rusia contra Ucrania.
Desde el museo destacan el talento y la valía de estas mujeres y algunos hechos demostrados como que, a diferencia de los hombres que tenían vetados ciertos ámbitos familiares, las mujeres tuvieron acceso a lo más íntimo de las personas durante los conflictos bélicos lo que da un valor añadido a sus imágenes.
Eso no quiere decir que no estuvieran también en el frente. Tomaron fotos directas de las víctimas de la guerra, que ahora nos remiten horriblemente a la guerra de Ucrania y, en concreto, al reciente bombardeo por parte de Rusia a la Maternidad de la ciudad de Mariúpol.
La exposición busca cuestionar la noción de género, la especificidad de la mirada femenina sobre la guerra, sacude ciertos estereotipos y muestra que las mujeres son «tanto transmisoras de imágenes como testigos de atrocidades», destacan sus organizadores.
Hay que recordar que el Museo de la Liberación nació en 2019 para honrar a los héroes que lucharon para liberar a la ciudad del nazismo