EFE / La Clínica Rotger de Palma ha sido condenada a pagar una indemnización de 71.669 euros a un hombre de 63 años por las lesiones sufridas a raíz de fallar en dos ocasiones al intentar colocar un sondaje uretral a un paciente operado de una hernia discal en noviembre de 2016.
Según la sentencia emitida por el juzgado de primera instancia número 15 de Palma, al paciente le apareció una falsa vía en el conducto uretral que le produjo una perforación y diversas lesiones a causa de los fallos en la colocación del sondaje uretral por parte del personal de enfermería.
El abogado del demandante, Daniel Martínez, adscrito a la Asociación el Defensor del Paciente, ha explicado que, tras el intento de colocar el sondaje vesical por parte de los facultativos, los enfermeros llamaron al urólogo de guardia para que le colocase otro tipo de sondaje «más intrusivo».
El defensor del paciente ha asegurado este miércoles en una nota que los enfermeros probaron «varias veces más la inserción del sondaje», si bien el paciente advirtió de que estaba sufriendo «mucho dolor» al tiempo que los facultativos hacían «caso omiso».
El abogado ha alegado que «al paciente se le realizó una carnicería en el conducto uretral», que le produjo lesiones como incontinencia urinaria, constantes infecciones y la extirpación de un testículo, así como disfunción eréctil y síndrome ansioso depresivo, entre otros aspectos.
Además, Martínez Raso ha alegado que el personal sanitario que atendió a su cliente no tenía los conocimientos suficientes para realizar dicha práctica y que el paciente no fue informado correctamente sobre los riesgos del postoperatorio.
La compañía aseguradora de la clínica privada, Zurich Insurance, ha argumentado que no hubo mala praxis durante el sondaje ya que «no existe evidencia de una incorrecta actuación por parte de los enfermeros» y que el paciente fue «informado debidamente de las complicaciones más frecuentes y graves» de la operación a la que se sometía.
También ha mostrado su disconformidad con la valoración de lesiones y secuelas reclamadas, tanto por el período de incapacidad de 775 días que pide la defensa como por los 29 días de ingreso hospitalario correspondiente a las intervenciones a las que fue sometido el hombre.
El médico especialista en urología y andrología autor del informe pericial ha determinado que la lesión uretral se produjo en el intento de sondaje que se realizó en la Clínica Rotger y que el paciente no tenía ninguna patología uretral antes de su ingreso en el hospital.
El juzgado de primera instancia número 15 de Palma ha asegurado que no se ha podido acreditar la disfunción eréctil e impotencia funcional del paciente afectado, por lo que la aseguradora deberá indemnizar al hombre con 71.669 euros frente a los 100.584 euros que solicitaba la acusación particular.
El juzgado ha apuntado que cabe interponer recurso de apelación