El presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí y el conseller balear de Turismo, Cultura y Deportes, Jaume Bauzá, han acordado hoy «coordinar esfuerzos» para llevar a cabo actuaciones conjuntas contra el turismo de excesos de la mano del Govern balear, el Ayuntamiento de Sant Antoni, el Consell de Ibiza y las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
Vicent Marí ha destacado: “este turismo no es bienvenido en nuestras islas y tenemos que ser contundentes”.
Por este motivo el conseller de Turismo ha afirmado que hablará también con las conselleries competentes en materia de Salud, Consumo y Comercio para “erradicar este turismo y que haya la máxima colaboración institucional».
«Junto con el sector privado se tiene que conseguir hacer los máximos avances y seguir actuando pero de manera más coordinada”, ha añadido el conseller Bauzá que ha afirmado que el anterior Govern ha estado «de espaldas» al problema.
El nuevo Govern afirma haber constatado también “un maltrato sistemático hacia Ibiza” en los últimos años en materia de fondos europeos e impuesto de turismo sostenible (ITS).
En este sentido, el conseller ha anunciado que se estudia la posibilidad de abrir una nueva convocatoria del fondo de resiliencia y que el reparto del ITS tiene que ser “transparente” y garantizar “que una parte de aquello que se recauda en cada isla tiene que ser destinado en la propia isla”.
Seguidamente, se ha abordado la apertura de la Escuela de Hostelería, que arrancará con cursos formativos y de calificación profesional del SOIB. En este sentido, conseller y presidente han acordado la creación de una comisión mixta entre el sector público y el sector privado para adaptar la formación a las necesidades que tenga el sector turístico. Este modelo será pionero “y hará de esta escuela un centro atractivo para estudiantes de todo el país”, y deberá ir acompañado de la apertura de la residencia de estudiantes del Parque Insular de Servicios de sa Coma.
Finalmente, se han abordado los cambios necesarios en la Ley Turística para facilitar medidas disuasorias contra el alquiler turístico ilegal y el instrusismo “para ser más contundentes y más eficaces”, y la necesidad de dotar Ibiza de un apoyo legal para poder regular la entrada de vehículos en la isla.