Para poder conocer la distribución de los fenómenos meteorológicos, como las heladas que se producen estos días de enero o conocer las zonas donde suele hacer calor en verano, el Consell de Ibiza pidió al geógrafo Joan Bauzà un mapa de riesgo con los datos recogidos por el satélite científico AQUA, de la NASA, destinado a recoger información a nivel planetario del ciclo del agua.
Lanzado en 2002, el satélite equivale a disponer 540 estaciones meteorológicas repartidas uniformemente por toda la isla de Ibiza ofreciendo información diariamente.
El mapa se ha generado a partir de los datos recogidos entre el mes de enero de 2015 y el mes de marzo de 2021 y ha permitido representar el riesgo de heladas de cada cuadrícula midiendo el número de días anuales con temperaturas por debajo de cero.
«La distribución de las zonas con más riesgo indica que son las llanuras y los fondos de valles las zonas más frías de la isla debido al fenómeno de inversión térmica», relata el Consell.
Además, el aire frío, más denso, circula desde las llanuras elevadas hasta el mar siguiendo los valles, de manera que genera la bajada de temperaturas.
De este modo las zonas más frías de Ibiza se encuentran en el Pla de Vila y el valle que sigue el Camí Vell de Sant Mateu, el Pla entre Sant Rafel y Sant Antoni, el Pla de Sant Jordi, y el curso final del Riu de Santa Eulària junto con el curso del Torrent de Labritja hasta el Pla Atzaró.
Esta distribución es la que el geógrafo Joan Bauzà denomina topografía a la inversa, dado que las bajas temperaturas no se encuentran en las cumbres de las montañas, sino en las llanuras y valles.
Del mismo modo, también se generó el mapa de altas temperaturas, registrando el número de días con temperaturas a nivel del suelo superiores a 45 °C.
La distribución es similar a la distribución de las heladas, y vuelve a mostrar como las llanuras son las zonas donde la temperatura logra niveles más elevados.
Los mapas tienen interés agrario para mostrar las zonas donde las temperaturas pueden tener un efecto limitante para la agricultura, tanto en cuanto a las heladas invernales como las altas temperaturas estivales, especialmente para nuevos agricultores que no conocen las características climáticas de la finca.
Curiosamente, las zonas con temperaturas más extremas son también las zonas agrarias por excelencia de Ibiza, con suelos profundos, de baja pendiente y de gran calidad.
Además, dadas las previsiones que se evalúan sobre el efecto del cambio climático, el Mediterráneo es una de las zonas que será más negativamente afectada con oscilaciones mas importantes de temperaturas, con un incremento de temperaturas extremas en verano, y una disminución de lluvias, de manera forzará a los agricultores a una adaptación del sistema productivo y de la gestión del agua.
La cartografía se representa a escala 1:25.000 para alcanzar el conjunto de la isla de Ibiza, con definición a nivel de finca.