EFE – La Agencia Tributaria y la Guardia Civil han intervenido 25 toneladas de almendras con toxinas muy peligrosas, en el marco de la denominada la operación «Nuts», en la que han sido detenidas en Mallorca tres personas españolas y una de Países Bajos, por los delitos de falsedad documental y contra la salud pública.
La operación se inició el pasado enero a raíz de la llegada a España de 25 toneladas de almendras procedentes de Australia mediante un proceso de importación que supuestamente cumplía con la normativa, ha informado el instituto armado en una nota.
Una vez que las almendras llegaron a Alicante, Sanidad Exterior realizó un análisis de dicho fruto, dando como resultado unos altísimos niveles de aflatoxinas, unos hongos muy tóxicos y perjudiciales para el consumo humano.
Se le comunicó al importador de dichas almendras que tenían que ser destruidas y esta persona, con domicilio en Mallorca, se comprometió a ello y solicitó autorización a Sanidad para el traslado a Mallorca de la carga y su destrucción en una incineradora.
Una vez que las almendras llegaron a la localidad mallorquina de Binissalem, los responsables del transporte de la mercancía para su destrucción rompieron el precinto sanitario del contenedor donde eran transportadas y la mercancía se depositó en una nave industrial.
De acuerdo con la investigación, cambiaron el tipo y tamaño de los envases y trasladaron las almendras a Alicante debido a las comprobaciones que estaban realizando las autoridades.
Paralelamente, en lugar de destruir las almendras, sustituyeron la mercancía por cáscaras de otras almendras con volumen similar, obteniendo de la empresa encargada de certificar la destrucción certificados de las 25 toneladas de almendras con toxinas.
De esta forma, con falsedades materiales y documentales, los ahora detenidos intentaban desviar a consumo un producto altamente perjudicial para la salud, como ha advertido la Guardia Civil.
Los investigadores inmovilizaron la mercancía en Alicante y detuvieron a los cuatro responsables de la importación, transporte y destrucción de estas almendras.
La operación ha sido llevada a cabo por el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil.