EFE/ La Policía Nacional ha detenido en Palma a un empresario que empleaba a extranjeros sin permiso de residencia sin hacerles contrato laboral y obligándoles a realizar jornadas de hasta 12 horas diarias, trabajando de lunes a sábado. Al arrestado, de 39 años, se le imputan delitos contra los derechos de los trabajadores y contra la integridad moral, según informa en un comunicado la Jefatura Superior de Baleares.
Los investigadores comprobaron que el detenido ofrecía empleo como herrero soldador a ciudadanos extranjeros en situación irregular, a los que inicialmente planteaba que trabajarían de las 7.30 a las 18.00 horas entre semana, con media hora de descanso para comer, y de 7.30 a 13.00 horas los fines de semana a cambio de sueldos de entre 1.500 y 2.000 euros, que cobrarían en negro.
El empleador, que les prometía que cuando pasara un tiempo les contrataría y les daría de alta en la Seguridad Social, cambiaba las condiciones pactadas y les hacía trabajar 12 horas algunas jornadas y superar las 68 horas semanales sin pagarles más por horas extraordinarias. De hecho, no les abonaba todo lo que les había prometido y les sometía a continuos insultos y desprecios, aprovechándose de su necesidad de obtener ingresos para mantenerse.