Agentes de la Policía Local de Santa Eulària detuvieron ayer por la tarde a un hombre por conducción temeraria y por conducir bajo los efectos del alcohol. El detenido circuló a gran velocidad en dirección a Vila desde la calle Margarita Ankermann de Santa Eulària, pero una patrulla le cerró el paso a la entrada de una rotonda en la carretera EI-300.
El hombre, que conducía un Mercedes-Benz C63 AMG descapotable de color blanco y llevaba a una mujer de copiloto, fue visto a gran velocidad en la calle Margarita Ankermann de Santa Eulària, desde donde puso rumbo a la capital ibicenca realizando eses y adelantamientos peligrosos en lugares prohibidos.
Entonces, se activó una patrulla de policías formada por el oficial y el encargado de turno, así como una Unidad de Atestados de la Policía Local, para darle alcance. También se movilizó a otra pareja de agentes, que se encontraba patrullando por la zona de Jesús, y que esperó al infractor a la altura del barrio de Can Ramon. Una vez llegó a la zona realizando adelantamientos por ambos carriles a gran velocidad, la patrulla activó las señales de emergencia y le cerró el paso el carril por el que circulaba, impidiéndole acceder a la rotonda.
Al detenido se le realizó un primer control de alcoholemia, en el que arrojó un resultado de 1.05 mg por litro de aire expirado, por lo que se solicito la presencia del destacamento de Tráfico de la Guardia Civil. En los dos siguientes controles con el etilómetro el resultado fue de 0.95 y 0.91 mg/l, constituyendo una tasa penal a lo que se sumó el delito contra la seguridad vial.
Además, el hombre tenía el carné caducado y circulaba sin el seguro obligatorio para su vehículo. Los agentes inmovilizaron el coche, que fue depositado bajo custodia en las dependencias policiales de Santa Eulària.