@Noudiari/ La Policía Nacional ha detenido en Valencia a Marcos José R. G., un hombre de 37 años y nacido en Barcelona, acusado de haber perpetrado una estafa inmobiliaria a gran escala. Se estima que más de 70 personas han sido víctimas de esta trama, que habría generado más de dos millones de euros.
Según informa Levante, el presunto estafador mantiene reclamaciones pendientes en los Juzgados de Eivissa, así como de Girona y Barcelona. Tras haber sido condenado por la audiencia de la capital catalana, el detenido se habría ocultado en Valencia a principios de verano, donde abrió un bar. Agentes de la comisaría de Patraix localizaron al detenido el pasado jueves, quien había estado empleando el nombre de su hermano para evitar ser encontrado. Tras ser interceptado por la Policía, el juzgado de Valencia decretó su ingreso en prisión.
El grupo de delincuencia económica de Barcelona detuvo a Marcos José R. G., el cabecilla de la banda, y a 14 ciudadanos más en mayo de 2009, aunque el líder no entró en prisión. Según indicó la investigación, el grupo había orquestado una trama en la que simulaban disponer de una amplia oferta de inmuebles, que ofrecían a sus víctimas con el señuelo de un precio muy económico, escudándose en la excusa de que se trataba de propiedades en proceso de subasta judicial. Los interesados en comprar estos pisos abonaban una paga y señal que oscilaba entre los 6.000 euros y los 12.000 euros. No obstante, jamás se formalizaba la venta porque los pisos no estaban en subasta.