Un hombre de origen dominicano, de 37 años, y otro de origen argentino, de 22, han sido detenidos por la Policía Nacional en Palma como presuntos autores de delitos de corrupción de menores y contra la salud pública por dar cobijo a menores fugadas de su domicilio y también tuteladas y darles droga a cambio de sexo.
Ambos detenidos han ingresado ya en prisión provisional tras haber pasado a disposición judicial, ha informado la Jefatura Superior de Baleares en un comunicado.
La investigación comenzó a partir de una información que alertaba de que menores podían haber mantenido relaciones sexuales con adultos a cambio de sustancias estupefacientes, después de que algunas chicas regresaran a sus domicilios bajo los efectos de las drogas y haciendo alusión a una vivienda donde los adultos daban cobertura a las menores fugadas.
El Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS) ha asegurado en otra nota que las denuncias interpuestas por la institución insular han sido el origen de una nueva acción policial que se ha saldado con estas dos detenciones.
A esta información se sumó otra del Grupo Operativo de Respuesta (GOR) de la Policía Nacional que, en los dispositivos efectuados en zonas de ocio, tuvo conocimiento de una vivienda en la zona de Cala Major que podría estar dando cobijo a menores de edad, algunas de ellas fugadas, y que podrían estar prostituyéndose bajo la protección del titular del domicilio.
Los agentes comprobaron la presencia de menores de edad en la vivienda.
La Unidad de Atención a la Familia (UFAM) de la Policía Nacional se hizo cargo de la investigación y logró identificar a dos hombres que supuestamente ofrecían droga a menores de edad y que habrían mantenido relaciones sexuales con algunas de ellas.
Los agentes recabaron indicios de delitos de tráfico de drogas por parte de dos hombres que, supuestamente, facilitaban marihuana y cocaína a menores de edad. En la vivienda les regalaban droga que luego consumían en sus propios domicilios.
Además los agentes descubrieron que regalaban la sustancia a las chicas menores y no a los chicos, para ganarse su confianza, y una vez que se encontraban con sus facultades mermadas, insistían a las chicas en mantener relaciones sexuales, provocando en algunas de ellas un sentimiento de dependencia hacia los adultos.
Por otro lado, los policías también tuvieron conocimiento de la existencia de un delito de tenencia ilícita de armas, ya que los adultos habrían exhibido algún tipo de arma de tipo «táser» y cuchillos a las menores e incluso les dejaban que las cogieran.
Tras recabar los indicios y declaraciones testificales, los agentes de la UFAM llevaron a cabo un operativo policial con el apoyo de la UPR de la Policía Nacional, registraron la vivienda, localizaron a los dos investigados e intervinieron dos básculas, sustancia pulverulenta de color blanco al parecer cocaína, dinero en efectivo, diversas pastillas, un machete y otros efectos.
Los investigados fueron detenidos como presuntos autores de un delito contra la salud pública, por facilitar sustancias estupefacientes a menores de edad, uno de los detenidos cocaína y el otro detenido marihuana.
Además fueron detenidos como presuntos autores de un delito de corrupción de menores: uno de ellos supuestamente por proporcionar sustancias estupefacientes a menores para posteriormente mantener relaciones sexuales con éstas, cuando se encontraban con sus facultades mermadas o indispuestas; y el otro presuntamente por facilitar marihuana para posteriormente insistir en mantener relaciones sexuales.
El IMAS ha destacado la importancia de las denuncias interpuestas por profesionales del área de Infancia y Familia como «claves» en la consecución de esta nueva operación policial, que esta semana se ha saldado con las dos detenciones.
La información facilitada por personal de la institución insular «a raíz de la detección de posibles indicios de una situación de delito y abuso contra la integridad de personas menores de edad, ha sido el origen de las investigaciones policiales».
Según el IMAS, la puesta en marcha de nuevas instrucciones que estipulan el protocolo de actuación a seguir frente a indicios de situaciones de abuso o agresión, «han demostrado ser las herramientas más eficientes y eficaces para llevar a cabo acciones policiales contra la corrupción de menores».
«Operaciones como ésta son fruto de la implicación y profesionalidad del personal que trabaja en la guarda y protección de los niños y jóvenes, que alertan, informan y denuncian de forma inmediata y constante a Policía Nacional o Guardia Civil ante cualquier sospecha de vulneración de sus derechos», afirma el IMAS.
Las detenciones «reafirman la necesidad de continuar incrementando la presión contra cualquier indicio o sospecha de maltrato, abuso o explotación a menores», concluyen. «Sólo desde la absoluta condena y persecución de los agresores que se aprovechan de niños y jóvenes vulnerables para obtener un beneficio sexual o económico se podrá contener una lacra que afecta a toda la sociedad y territorios».
EFE