El centro de recuperación Palma Aquarium ha tenido que amputar una aleta a dos tortugas marinas jóvenes, este verano. Una de ellas, Enjoy, la encontraron en aguas de Formentera y ha perdido una aleta trasera porque estaba enredada en una red de plástico. La otra, Thanos, la rescataron en julio en aguas de Colònia de Sant Jordi (Mallorca) con una aleta delantera totalmente liada con plásticos. Para salvarles la vida tuvieron que amputar las aletas afectadas. Cuando estén del todo recuperadas las devolverán al mar ya que son capaces de desenvolverse con una extremidad menos.
Este reportaje de IB3 destacan la capacidad de supervivencia de las tortugas marinas, su resistencia y fortaleza, pero sobre todo resaltan que los plásticos en el mar son un gran peligro para ellas.
Según explica Gloria Fernández, responsable de Palma Aquarium, los trozos de plástico en el mar se van llenando de microorganismos y algas y esto hace que las tortugas los confundan con comida y por eso se enredan en ellas.
Si alguien encuentra una tortuga liada en plásticos debe llamar al 112 y no intentar quitarle los plásticos para evitar herirla o causarle hemorragias, hay que esperar a que lleguen los especialistas.